La música emergente sigue encontrando su refugio en Ultrasons

CASTELLÓ. Nadie esperaba en enero que este año iba a ser tan complicado para hacer música. Especialmente nueva música. Desde que empezase la expansión del coronavirus en marzo, las radios siguieron sonando, aparecieron los conciertos en streaming, pero las giras y los festivales quedaron en suspenso. Sin la herramienta de los directos es difícil el desarrollo promocional de cualquier disco o canción, pero más lo es para aquellas nuevas propuestas que han aparecido recientemente en el mercado. ¿Cómo enganchar a un público que no te conoce cuando, además, compites contra los videoconciertos de otros artistas consagrados? Internet posibilitó durante el estado de alarma que fuera igual de fácil escuchar en vivo a Harry Styles que a cualquier artista local. Por eso, dar voz a proyectos emergentes se ha convertido, ahora más que nunca, en una necesidad.

En l'Alcora hay una propuesta que cada año intenta aportar su granito de arena, es el ciclo cultural Ultrasons. Una cita ecléctica y multidisciplinar que se nutre de nombres nuevos para tejer su programación. Este año destaca además por la presentación de discos y el estreno de nuevas iniciativas artísticas, del 16 al 25 de octubre. Entre otros, pisarán por primera vez tierras valencianas el duo catalán Magalí Sare y Sebastià Gris, quienes lanzaron en enero su trabajo A boy and a girl. Producido por David Soler y Santi Careta, la suya es una clara apuesta por la experimentación: en sus canciones el folklore mallorquí se funde con la música clásica de cámara y la electrónica. Con esto han conseguido que su álbum haya sido considerado como uno de los mejores trabajos de 'World Music' para la World Music Charts Europe

Otra propuesta que destaca es la de Versonautas y el spoken word. Ana Sanahuja y Roqui Albero son expertos en eso de la canción hablada. Además en su música combinan las "partituras" de poesía con pianos, trompetas y bases electrónicas. Para su último disco Astre Blau (editado en febrero) han colaborado con Jorge Drexler, Sílvia Pérez Cruz, Raúl Rodríguez y Chipirón de Cádiz.

Y cambiando de vibraciones, pero también con un disco bajo el brazo, se podrá disfrutar de Tangos per a la teua absència, del pianista de la Vall d'Uixó, Néstor Zarzoso. El castellonense narra la historia de una ausencia, la espera, los paseos, unos cafés, las lágrimas de un afinador de pianos. Txaikovski pidiendo pomada o Piazzolla comiendo caracoles. Pero también suenan Stravinski, Albéniz, Copland, Satie o Xostakóvitx, todos músicos que fueron atraídos en algún momento por el tango. Por otra parte, l'Alcora también acogerá el proyecto Sons d'Embat, liderado por el acordeonista Pau Barberà. El músico de Ontinyent desembarca en el ciclo con una formación proveniente de València, Islas Baleares y Cataluña, para presentar un repertorio basado en canciones de raíz peninsular y mediterráneas. 

Las referencias locales las completan Don't worry, we are brothers. Tres chicos de origen "churro" que cantan "a las chicas guapas y a la hipocresía reinante". Se presentan además con Elegancia Cero, un disco grabado en este 2020 bajo los efectos del alcohol, el que reivindican y enaltecen como bálsamo aglutinador en las relaciones sociales. Y la exposición La Bacanal, una muestra ecléctica y llena de colores que reúne algunas de las obras publicadas en El Colmo Fanzine. Un proyecto colaborativo y comunitario alrededor de la cultura, donde la ilustración es su columna vertebral. También, Sotto Voce, con fuertes lazos en l'Alcora, combinarán en su directo un repertorio renacentista y contemporáneo. Igualmente, Abraç Band abrirán una edición más el ciclo cultural con un combo de instrumentos de viento y batería surgido de la escuela Mondo Rítmic. 

Un paso más allá: proyectos con sello Ultrasons

Con todo, este año Ultrasons ha tendido el brazo incluso a proyectos que todavía no habían nacido. Fue a finales de abril cuando el festival creó una 'convocatoria de apoyo a la creación' para impulsar proyectos artísticos nuevos y en formato breve que posteriormente se presentarían en su edición de 2020. Pues bien, entre todas las ideas presentadas han resultado ganadoras dos. Por un lado, La distància es un trabajo que surge durante el estado de alarma y que, por eso, pretende investigar todos los sentimientos que ha vivido nuestro cuerpo durante aquellos meses de aislamiento y distanciamiento. Rebeca Izquierdo y Panchi Vivó profundizarán a través de la música, la danza y el teatro, en ese querer estar más cerca de la gente y a la vez no poder por la responsabilidad de no tocar. 

Por otro lado, José Gas y Aso Pryomal son los responsables de Aso Pyragahs, una conversación entre la fotografía y la música en la que los espectadores únicamente percibirán la fusión de las sombras de los protagonistas con la proyección de imágenes y música en directo. 

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Además de todo esto, Ultrasons completará su programación con diferentes charlas, previamente grabadas y conducidas por Laura José y Miriam Chiva, con las que se profundizará en la profesionalización del sector cultural. 'Diálogos en la nube' cuenta con los testimonios de Marina Hervás, Carla Chillida, Pau Ayet Asun Pérez, Cristóbal Saborit, Nuria Albella, Javier Garcés y Elena Medina “La Megi”. Además, la actividad 'Ultrasons als instituts', pensada para acercar las vibraciones del ciclo a las aulas, se trasladará al plano digital con la adaptación didáctica del proyecto I Carles esdevingué piano de José Luis Miralles Bono sobre la obra de Carles Santos. 

Premio Ultrasons 2020

Y en la cuarta edición de los premios Ultrasons, la organización ha querido reconocer el trabajo de Bestialc, "por ser una cita referente de la escena musical, por luchar por la música en directo y por celebrar su 25 aniversario lo más pronto posible". Desde que se pusiera en marcha en 1996, Bestialc ha traído hasta l'Alcora nombres tan dispares como La Banda Trapera del Río, Mambo Jambo, Sex Museum, The Tunics, Anomalys, Los Chicos, The Godfathers, Los Hermanos Cubero, Víctor Coyote, Vurro o La Perla, con el importante matiz de ser siempre gratuito para el público. Bestialc nació en los 90 como un recurso para recaudar dinero con el que poner en marcha una emisora de radio y hoy es uno de los festivales más longevos de las comarcas de Castellón.