CASTELLÓ. El Corredor Mediterráneo avanza... pero no al ritmo que les gustaría a los usuarios y empresarios de la Comunitat Valenciana. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha adjudicado este miércoles la implantación de los sistemas de seguridad y comunicaciones entre Castelló y Tarragona, un tramo en el que todavía no se ha actuado y en el que se debe sustituir el ancho ibérico actual por el internacional.
Más allá de la adjudicación a la compañía Sistemas y Montajes Industriales por un montante superior a los 12,7 millones de euros (IVA incluido), la importancia del contrato aprobado por el consejo de administración de Adif radica en que estos son los trabajos que deben culminar la obra en estos 155 kilómetros del Corredor. Y esto da una idea de cuándo puede estar en funcionamiento el ancho internacional en este trazado.
La actuación cuenta con un plazo de ejecución estimado de 22 meses y comprende las obras "de las instalaciones de telecomunicaciones fijas, así como el resto de actuaciones para las pruebas y puesta en servicio", ha señalado Adif en un comunicado. Con ello, no será al menos hasta 2024 cuando el ancho internacional esté en funcionamiento en las dos vías entre Castelló y Tarragona.
Esto supone un retraso sustancial respecto a las previsiones que manejaba años atrás el Gobierno. Desde el Ministerio de Transportes no refieren una posible fecha de puesta en marcha, mientras lo último que había anunciado la ministra Raquel Sánchez es que "en 2025 o 2026" estaría todo el trazado desde Almería a la frontera francesa... un compromiso que habrá que ver si puede cumplir.
De momento, los trabajos entre Castelló y Tarragona para cambiar el ancho en las dos vías (algo que se supone que se hará primero en una y después en la otra) todavía no tienen fecha definida y en Adif trabajan en su planificación.
Las actuaciones ahora adjudicadas, eso sí, permitirán la circulación de los trenes AVE, ya que en el tramo entre Castelló y l'Ametlla de Mar se instalará "la tecnología de telecomunicaciones propia de las líneas de alta velocidad", destacan desde Adif. Con ello, y a falta de la plataforma propia para el AVE entre València y Castelló (que no se prevé, al menos, hasta 2026), los convoyes AVE podrían ya unir la Comunitat con Barcelona. E incluso realizar un recorrido circular entre Madrid, València, Barcelona y Zaragoza.
Pero primero habrá que ir quemando etapas. La primera es la conclusión de las obras del tercer carril entre València y Castelló, un hito que en Adif marcan para finales de año o principios del siguiente, y que tampoco será sencillo conseguir. Esto abriría las puertas a los trabajos en el tramo Castelló-Tarragona... o al menos así se ha trasladado siempre.