CASTELLÓ. Al Plan General (PG) de Castelló le quedan tres plenos para su aprobación definitiva. Adaptadas las piezas Estructural (PGE) y Pormenorizada (POP) a las exigencias de la Declaración Ambiental y Territorial Estratégica (Date), el Acord de Fadrell empieza a ver la luz al final del túnel. Aunque hablar de plazos resulta aventurado al depender de algunas variables, sí que existe la confianza de culminar la interminable tramitación a mediados de 2021.
El primer paso se dio este jueves por parte de la Junta de Gobierno Local al validar esos dos documentos del marco urbanístico, cuya redacción arrancó en julio, cuando la Conselleria remitió al Ayuntamiento la citada Date, instrumento fundamental en la elaboración final del PG. La sesión del próximo 17 de diciembre marcará la cuenta atrás, ya que a partir de ese instante se precipitarán los acontecimientos.
No solo se avalarán el PGE y POP, sino que también se admitirán las alegaciones de la parte Pormenorizada. En total, 135 de las 412 recibidas. Algunas se han estimado en su totalidad y otras parcialmente, pero todas han contribuido a garantizar un desarrollo sostenible, cohesionado y vertebrador del territorio. La publicación del acuerdo plenario en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) permitirá abrir la segunda y última exposición al público, de 20 días hábiles, lo que sucederá previsiblemente en enero.
Finalizado el plazo, los técnicos municipales abordarán las resoluciones de las objeciones técnicas, que obligarán a celebrar un nuevo pleno para ajustar todavía más el Plan General. Ese expediente, con las preceptivas correcciones (en caso de haberlas), se enviará a la Comisión Territorial de Urbanismo para la enésima revisión. Ese momento resultará clave. Dependiendo de lo que tarde la Conselleria en comunicar su visto bueno, será más o menos factible cumplir con éxito los tiempos establecidos para disponer por fin del marco legal en el segundo semestre del año.
La tercera sesión plenaria servirá tanto para aprobar tanto el documento de la dirección Territorial como el POP en lo que supondrá un episodio histórico para la ciudad, teniendo en cuenta que el anterior Plan de Ordenación Urbana del PP fue anulado en los tribunales en 2012.
Cabe destacar que la nueva propuesta del plan Estructural calca la versión presentada en 2019, con la eliminación de los sectores Senillar, Litoral, Mestrets y Borriolenc. Además, incorpora la redelimitación de la carretera Grau-Almassora y la Plataforma Logística. Otro aspecto importante, en relación al modelo del PP, tiene que ver con el suelo no urbanizable. Así, se desclasifican 11 millones de metros cuadrados, protegiendo hasta 22 millones de superficie rústica para impeler la recuperación verde y apostar por la reactiviación de la agricultura.
Del mismo modo, se reservan espacios para usos sociales, educativos o sanitarios. Por ejemplo, para la construcción de nuevos colegios o la creación del Conservatorio Superior de Música y Danza, una pretérita reivindicación y que se recoge en el Plan General en el solar ubicado junto al Palacio de Justicia en el bulevar Blasco Ibáñez.