CASTELLÓ. La obra de reforma del Centro Social Fátima, que arrancó el pasado mayo y culminará en enero de 2024, completará un paquete inversor de casi 1,8 millones de euros materializado en el último año para revitalizar los barrios de Fátima y Corell, en Almassora. En cuatro de los cinco proyectos promovidos ha sido clave la cofinanciación de la Unión Europea en un 50% del coste económico.
De esos casos, la reforma del Centro Social Fátima es la única que no ha podido culminar el anterior ejecutivo municipal socialista que encabezó Mercedes Galí. El contrato de obras quedó desierto a finales del año pasado por falta de empresas interesadas. Curiosamente, meses después lo licitó el Ayuntamiento por el mismo importe y sí logró adjudicarlo a Actividades Constructivas Noel por 270.616 euros, aunque el retraso acumulado en la ejecución de la obra dejará su estreno en manos del nuevo ejecutivo que encabeza la popular María Tormo.
Los trabajos en marcha cambiarán la distribución del recinto municipal situado en el número 27 de la calle San Pablo. Se eliminarán las barreras arquitectónicas, se mejorará la acústica y la eficiencia energética. Se crearán dos grandes salas diáfanas donde se realizarán todas las actividades de integración social relacionadas con la lectura, juegos infantiles y otro tipo de labores. La inclusión social de los vecinos más desfavorecidos del barrio es, precisamente, la razón de ser de este espacio público.
A escasos metros, también en el barrio Fátima pero en el número 56 de la calle Nou d’Octubre, la empresa Eiffage Energía finalizará en breve las obras de adecuación, como sede de asociaciones vecinales, del local municipal situado en la planta baja del edificio de viviendas. En este caso, la inversión de 159.985 euros ha permitido distribuir en el interior una sala de reuniones, tres despachos y tres almacenes para asociaciones de barrio. El Ayuntamiento se reserva un despacho más.
En las afueras del barrio, el consistorio ya invirtió el año pasado 119.601 euros para prolongar un tramo de la calle Les Alqueries hasta el cruce con la avenida de José Ortiz, a espaldas del tanatorio de Almassora. El trabajo lo realizó la empresa Alfaro Angulo Hermanos. Se instaló una red de saneamiento y aguas pluviales, se pavimentó la calzada y las aceras, se colocó la red de agua potable y el alumbrado público en ese nuevo tramo y en el solar anexo donde se ha construido el circuito para bicicletas BMX. Esa obra es la única de todas que no ha contado con dinero de la UE.
La prolongación de esa calle permitió acometer las obras recién finalizadas del nuevo circuito pumptrack para bicicletas BMX, cuyo contrato también quedó desierto en abril del año pasado por falta de empresas interesadas. Al igual que sucedió con el contrato del Centro Social Fátima, volvió a licitarse este año por el mismo importe y fue adjudicado por 205.579 euros a la empresa Pumptrack Park. Las obras del circuito, que incluye una zona de boxes de 269 metros cuadrados, concluyeron en mayo.
En el caso del barrio Corell, lindante con Fátima, la empresa Eiffage Infraestructuras ya ha culminado las obras de regeneración urbana. Se ha renovado la red de alcantarillado, que era de fibrocemento y con diámetros pequeños. También se ha implantado una red de pluviales para conducir las aguas al Barranquet y paliar las inundaciones que sufre el barrio cada vez que llueve de forma copiosa. Además, se ha restringido el tráfico de coches en el barrio y se ha renovado la red eléctrica y de telecomunicaciones.
Los trabajos, cifrados en 1.022.876 euros, también han permitido ampliar las aceras en 14 calles del barrio que tenían problemas de accesibilidad por su estrechez y por su degradado pavimento. En concreto, se ha colocado adoquín en un tramo de la calle San Esteban y en otros viales como San Cornelio, Castañeda, San Cayetano, Santa Rosa, Santa Inés y San Bartolomé. También se le ha dado un carácter más peatonal en otro tramo de la calle San Esteban y en las calles Corell, Segorbe, Nules, Pino, Moncofa y Almenara. En todos ellos se han trazado cuatro colectores de aguas residuales, una red y un colector de pluviales.