CASTELLÓ. Acción, reacción. La visita del presidente del PPCV a la Comunitat Valenciana, Carlos Mazón, ha servido para volver a mover las aguas turbias del partido en la provincia de Castellón y para que la alcaldesa de Onda haya recordado que su única prioridad es Onda y los ondenses "y no la política de Juego de Tronos".
Y es que el presidente regional aseguraba ante las insistentes preguntas de los medios de comunicación que la defenestración de Carmina Ballester no había sido un castigo sino un trampolín para reconducir la situación del partido. El PPCV ha puesto en marcha una gestora y le ha quitado a la alcaldesa todos los cargos orgánicos que poseía dentro del PP, pese a ser la única alcaldesa de un municipio de más de 20.000 habitantes con mayoría absoluta para el PP en toda la provincia.
Ante estas nuevas declaraciones del presidente regional, la alcaldesa de Onda ha recordado que "yo estoy dedicada al 100% en mejorar la calidad de vida de los ondenses, en ayudarles a superar esta pandemia y en generar nuevas oportunidades y empleos para los ondenses, que es lo que de verdad importa".
Recuerda la de Onda que "las cuestiones internas de partido estoy convencida que se van a resolver de forma interna, dialogando con el presidente Carlos Mazón, que tiene todo el apoyo de Onda para ser el próximo president de la Generalitat". De esta forma, Ballester evidenciaba que los afiliados del PP de Onda -una de las agrupaciones más numerosas de la provincia, entre las que se incluyen- mantienen su lealtad al proyecto de Mazón.
La alcaldesa de Onda ha querido minimizar la polémica y ha subrayado que "cada segundo de mi tiempo está dedicado a Onda y no voy a perder ni un segundo en otras cuestiones. Mi equipo y yo seguimos trabajando cada día en gestionar mejor y en destinar todos los recursos municipales a solucionar los problemas que cada día me trasladan los vecinos por la calle".
"Esta -ha añadido- es la política en la que yo creo y no en la de Juego de Tronos".
Y es que el anuncio del ex presidente, Miguel Barrachina, de no optar a la reelección como presidente provincial provocó que aparecieran tres candidaturas: la de Marta Barrachina, la de Ballester y la de Lluis Gandía por Vinaròs. Antes de llegar al proceso de primarias, tanto Ballester como Gandia se retiraron y la alcaldesa de Onda quedó integrada en la nueva ejecutiva.
Sin embargo, la paz interna nunca fue una realidad y la tensión ha estado presente en Onda y en otras localidades de la provincia a la vista de los resultados. En Onda la alcaldesa, tras ser elegida por aclamación presidenta local, procedió a una reconfiguración del equipo de gobierno.
Ballester modificó las competencias y retiró algunas a Salvador Aguilella y a Elena Albalat. El primero, secretario general del PP en la provincia y, la segunda, vicesecretaria autonómica y persona cercana a Mazón. La retirada de delegaciones incluía una pérdida de sueldo, lo que hizo estallar la tensión.
En cuestión de días se puso en marcha la gestora del PP de Onda que cumple un mes ya pese a que, desde Onda confirman que todavía no ha llegado el escrito que debe notificar esta aprobación del comité ejecutivo del PPCV para que el PP de Onda recurra la decisión ante el Comité de Derechos y Garantías para no vulnerar la garantía de defensión y, sobre todo, para que la aprobación tenga validez.
De hecho, Mazón ha asegurado que "tengo una conversación pendiente con la alcaldesa". Sin embargo, la bola de nieve es tan grande que cada día que pasa es más complicado recuperar el consenso perdido.
