CASTELLÓ. El equipo de gobierno de Bejís llevará este viernes al pleno para su aprobación, la privatización de la planta embotelladora municipal. Esta privatización, promovida por la alcaldesa socialista María José Madrid, ha suscitado el rechazo de la oposición que considera que "atenta contra el futuro del municipio" y denuncian que el equipo de gobierno ha ignorado la petición de someter esta decisión a referéndum.
El equipo de gobierno por su parte busca mejorar la gestión mediante la concesión por 20 años a una mercantil del uso y distribución de la planta, un modelo que opera con éxito en Aigua de Benassal que rebasó los dos millones en ventas el pasado 2019 y que podría ser el espejo en el que mira la alcaldesa de Bejís.
Sin embargo, algunos vecinos expresaron su rechazo mediante una recogida de firmas promovida por el Partido Popular que consiguió el apoyo de más de 40% de los vecinos en apenas una semana. La localidad de Bejís cuenta con un censo de 380 habitantes y actualmente la embotelladora emplea a una decena de vecinos. Desde la oposición denuncian que el equipo de gobierno ha hecho caso omiso de la recogida de firmas.
Agua de Bejís, que proviene del manantial Los Cloticos lleva siendo de titularidad municipal desde 1929 y pese a que la distribución de agua se interrumpió durante la Guerra Civil, se reanudó en 1941 y fue cobrando popularidad. Finalmente en 1985 se inauguró la planta embotelladora que este viernes se debatirá en pleno si pasa a gestionarse por una empresa privada.
