CASTELLÓ. Castelló busca un celador (o celadora) que ayude al Prior de la Basílica de Lledó, Joaquín Guillamón, en la celebración de los actos religiosos, entre otros cometidos. El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) publica la relación provisional de aspirantes para ocupar la plaza por turno libre, esto es, a través de la baremación de méritos.
El número total de admitidos asciende a 28. Muchos repiten respecto a otras convocatorias impelidas tanto por el Ayuntamiento de la capital de la Plana como por otras entidades locales de la provincia para ocupar empleos como auxiliar administrativo, por ejemplo. De entre los candidatos destacan el joven historiador Maxim García, autor del libro Taulelleria del siglo XVIII a la Real Fábrica; Carles Porcar, primo del exconcejal de Deportes de Castelló, Enric Porcar, y del exgerente del Patronat d'Esports, Francesc Rubio; y el periodista y político Gabriel Ferrandiz, candidato a la alcaldía de Burriana por EUPV en 2015 y 2019 y número tres de la lista de Unides Podem-EU en las pasadas elecciones del 28 de mayo.
Para postularse, los candidatos únicamente han tenido que pagar una tasa de 8,50 euros, sin acreditar ninguna titulación, ya que no se exige para el cargo. Al tratarse de un concurso, corresponde a un tribunal valorar la experiencia y el currículo académico de cada aspirante a fin de determinar la persona adecuada.
La búsqueda de un celador (o celadora) por parte del consistorio está justificada, en tanto en cuanto la Basílica de Lledó se trata de un inmueble de titularidad municipal. Esto excluye al Obispado de Segorbe-Castellón de participar en la tramitación pese a que una de las principales funciones del trabajo obedece a la prestación de servicios especiales relacionados con los oficios.
La plaza forma parte del proceso de estabilización de 268 empleos de funcionarios que el anterior equipo de gobierno, el denominado Acord de Fadrell, aprobó el 6 de abril de 2023. El acuerdo se adoptó en virtud de la Ley 20/2021, de 28 de diciembre, de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el sector público.
Unos días después, el 20 del mismo mes, el BOP publicó la convocatoria con vistas a proveer en propiedad esos puestos mediante el sistema de concurso y concurso-oposición. En realidad, la oferta extraordinaria contempló un mayor número de ocupaciones ante la pretensión del ejecutivo de reducir la eventualidad hasta el 6,24% (en ese momento, del 29,05%).
Con arreglo a ese objetivo, el Ayuntamiento lanzó lo que se conoce como OPE para cubrir hasta 300 plazas. De esa cantidad, 230 se asignaron a aquellos interinos con antigüedad en una entidad local antes del 1 de enero de 2016 (concurso). Para el resto (empleados que comenzaron a trabajar entre 2016 y 2018), se estableció como fórmula el concurso-oposición. Todos los procedimientos deberán estar resueltos antes del 31 de diciembre de 2024.