Castelló sopesa alargar hasta noviembre el plazo de cancelación de las multas de las videocámaras

CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló sopesará la posibilidad de alargar hasta noviembre la cancelación del sistema de multas de las videocámaras. La decisión, que se tomará en los próximos meses, dependerá del impacto de la campaña informativa prevista para septiembre. Si la ciudadanía muestra un nivel de conocimiento medio o bajo respecto al funcionamiento del método de fiscalización, Movilidad valorará mantener la actual suspensión unas semanas más, según señalan fuentes municipales.

Siempre que la situación obligara a ello, se trataría de repetir la fórmula empleada a principios de año, cuando el servicio se activó, pero a modo de prueba durante mes y medio. Los 21 aparatos instalados en los accesos al centro, en sustitución de los tradicionales bolardos, se limitaron a leer las matrículas de los vehículos, sin concluir en la apertura de expedientes sancionadores.

Entre el 1 de enero y el 15 de febrero, la entrada y salida a las principales calles del casco antiguo no acarreó ningún tipo de recargo para aquellos conductores no autorizados. Sin embargo, los que circularon sin permiso sí recibieron una carta explicativa, tanto sobre las características del nuevo método de control como acerca de las consecuencias económicas de transitar en el futuro sin la correspondiente tarjeta.

Controversia y malestar

El sistema de videocámaras entró oficialmente en funcionamiento el 16 de febrero y se mantuvo operativo hasta el 14 de abril. En ese periodo de tiempo, el Ayuntamiento impuso alrededor de 7.000 multas (200 euros por cada una), como así recogió el decreto que justificó posteriormente la paralización. El creciente malestar de los residentes, comerciantes y transportistas obligó finalmente a dejar en stand-by el servicio, devolviendo a los contribuyentes las sanciones cobradas.

El hecho de que Movilidad contemple como una opción prorrogar la actual supresión, para nada significa que se vaya a aplicar. Al contrario, la idea es que la mentada campaña divulgativa resulte un éxito, de manera que todos los estratos de la población y sectores profesionales implicados estén debidamente informados antes del 1 octubre.

La estrategia informativa significará explotar los soportes y herramientas existentes en el mercado. Desde anuncios en las redes sociales, como Facebook, hasta la colocación de carteles en marquesinas y Mobiliario Urbano como Punto de Información (Mupis). La adjudicataria, asimismo, realizará buzoneo, reparto de folletos o branding.

Por otro lado, el Ayuntamiento habilitará una plataforma especial, compatible con la inmensa mayoría de los dispositivos móviles, para suministrar información detallada de las videocámaras. Además de ofrecer un mapa con la ubicación de los equipos de grabación, la aplicación facilitará itinerarios personalizados y permitirá realizar todo tipo de gestiones.