CASTELLÓ. Los factores climáticos como la sequía, altas temperaturas y precipitaciones extremas (la Dana) se ensañaron en Castellón el pasado año en buena parte de sus cultivos, especialmente en el almendro, olivar, trufa y la vid, según confirma la Conselleria de Agricultura en el último informe de rendimientos de 2024, un balance que dará traslado al Ministerio de Hacienda para que aplique reducciones en las declaraciones del IRPF. El documento muestra los graves daños en el cítrico de Valencia por la Dana, mientras en la provincia esta fruta no registra una gran variación y apenas aparece, ya que recoge las producciones que sufrieron un descenso igual o superior al 30%.
El análisis de la Conselleria recoge las anomalías del tiempo, calificando 2024 como un año "extremadamente cálido", la reducción de precipitaciones y la irrupción de los temporales de la Dana en octubre en València y en noviembre en Castellón, y describe los efectos de las condiciones climáticas en los cultivos de la Comunitat Valenciana. En Castellón, Agricultura registra reducciones de rendimiento en hortalizas, viñedos, almendro o cereales.
Así, en Castellón expone que la sequía causó pérdidas de un 60% en el almendro, o de un 80% en cereales y en el olivar. Daños que se expandieron en el Alto Palancia, Baix Maestrat, Els Ports, Plana Alta, Plana Baixa y l'Alcalatén.
En el Alto Palancia, la cosecha de almendró bajó entre un 70% a un 100%; la vid lo hizo de un 34% a un 40%; y el caqui, de un 32% a un 82%. En el Baix Maestrat hubo caídas superiores al 30% en la alcachofa, coliflor, algarrobo o la vid.
Els Ports experimentó una bajada de un producto estrella de la zona como la trufa, con una caída de un 60%, mientras las pérdidas en la vid fueron de un 40% y en lavanda de un 39%. El almendro repitió descenso en la Plana Baixa, Plana Alta y l'Alcalatén, llegando en algunos municipios al 90%. Asimismo, la Plana Alta y l'Alcalatén sufrieron menores rendimientos en la vid.
Menor afección en el cítrico de Castellón
Por su parte, el cítrico, a pesar de los problemas de rentabilidad que viene sufriendo en los últimos años, no protagonizó en general un desplome de sus rendimientos, ya que el informe de la conselleria solo recoge disminuciones de un 30% en cultivos muy concretos de Torreblanca en la Plana Alta y de Castellnovo en el Alto Palancia. Los daños en esta fruta se extendieron en las comarcas productoras valencianas por la Dana de octubre.
No obstante, otras estadísticas ponen de manifiesto las dificultades que atravesaron en 2024 los productores de cítricos por la falta de precipitaciones y las plagas. Al respecto, la superficie de naranjas y clementinas de la provincia, la principal variedad agraria de la zona, dejó sin cultivar 600 hectáreas en el último año, según el Esyrce del Ministerio de Agricultura.
De hecho, AVA-Asaja ha estimado los daños en 2024 en los 1.870 millones, en el que consideran "el peor año de la historia", de los que 1.380 correspondieron a València y 200 a Castellón.