CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló da el paso definitivo para la entrada en vigor del renovado servicio de la Oficina de Recaudación. El consistorio ha formalizado el contrato para la gestión del órgano con la empresa adjudicataria, Servicios de Colaboración Integral (SCI), firma que ya prestaba anteriormente la función. En este sentido, la compañía asume la nueva concesión por un importe ligeramente superior a 5,6 millones de euros y una duración inicial de tres años, hasta el 15 de diciembre de 2028, con la posibilidad de dos prórrogas anuales hasta un máximo de cinco ejercicios.

El contrato, licitado en abril con un presupuesto base de 8,8 millones de euros, permite dar continuidad a un servicio clave para la gestión de los ingresos municipales después de un proceso administrativo prolongado que ha incluido un contrato puente y varias modificaciones para ajustar el funcionamiento del sistema mientras se resolvía la nueva concesión. Entre las principales novedades del documento destacan las mejoras previstas en las instalaciones y los medios técnicos. A tal efecto, la Oficina de Recaudación prevé implementar a lo largo de 2026 los cambios contemplados en el pliego técnico, entre ellos la búsqueda de un nuevo emplazamiento que sustituya a la actual sede, situada en la esquina entre la plaza del Bisbe Pont i Gol y la calle Gobernador.

Del recurso por la subrogación al contrato 'puente'

Asimismo, el contrato contempla la renovación integral del espacio y la incorporación de nuevas herramientas tecnológicas para modernizar la gestión, un proceso que se desplegará de manera progresiva durante el próximo año con el objetivo de "mejorar la atención al contribuyente y optimizar los procedimientos internos", según aseguró el portavoz del gobierno municipal, Vicent Sales. La formalización del acuerdo se produce tras la finalización del denominado servicio 'puente', aprobado para cubrir "el vacío generado después de siete años de prestación sin una licitación formal". Durante este lapso de tiempo, el Ayuntamiento aprobó varias modificaciones para ajustar un documento que resultaba "complejo" por su estructura diferenciada entre importes fijos y variables.

Con ello, una vez licitado el servicio hace ahora ocho meses, la Mesa de Contratación elevó la propuesta de SCI al considerarla la más ventajosa para los intereses municipales frente a la segunda concurrente, Coordinadora de Gestión de Ingresos (CGI). La actual concesionaria se impuso en la baremación a través de una mayor puntuación técnica, avalada por su conocimiento de los procedimientos municipales y su adaptación a la estructura del consistorio. Además, la continuidad de SCI abrió la puerta a desbloquear un recurso contencioso-administrativo presentado por el sindicato FeSMC-UGT ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) por la subrogación de la plantilla, al mantenerse los 37 trabajadores bajo la misma empresa gestora.