COMARCAS

El Síndic de Greuges constata "falta de colaboración" entre la Vall d'Uixó y la Generalitat por el caso de la residencia Hogar Sagrada Familia

La institución recuerda a ambas administraciones que deben garantizar la adecuada atención a la población mayor, dependiente y en situación de extrema vulnerabilidad, así como el cumplimiento del Contrato Programa 2025-2028

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CASTELLÓ. El Síndic de Greuges se ha pronunciado acerca del conflicto existente entre la Vall d'Uixó y la Generalitat relativo a las condiciones de seguridad en las que se encontraba la residencia para personas mayores Hogar Sagrada Familia. La institución ha constatado la "falta de colaboración" entre ambas administraciones y les ha recordado, por un lado, que deben velar por la adecuada atención a las personas mayores, dependientes y en situación de extrema vulnerabilidad, mientras que, por otro, que están obligados a cumplir tanto con los compromisos adquiridos en la firma del anterior Contrato Programa 2021-2024 como con el actual Contrato Programa 2025-2028.

La reprimenda para la Conselleria no se queda ahí, pues el Síndic, en su resolución, pretende "recordar a la Conselleria la obligación que, en el ejercicio de sus competencias de inspección y control, tiene de supervisar con el máximo rigor el cumplimiento de los requisitos normativos y exigencias técnicas establecidos para las residencias de personas mayores".

Un conflicto que viene de lejos

Todo empezó el 13 de noviembre de 2024. Por aquel entonces, el Ayuntamiento de la Vall d'Uixó elevó una queja al Síndic alertando sobre las deficiencias en materia de seguridad que presentaba la residencia y denunciando que, pese a saberlo, la Generalitat seguía enviando residentes al centro. No solo eso, sino que el consistorio quiso dejar claro que, pese a ser los encargados de prestar el servicio, la responsabilidad y la competencia en lo que atañe a velar por la seguridad de los residentes es de la Generalitat, mientras que esta siempre ha defendido que no es hasta el año 2030 cuando se efectúa el traspaso de las competencias.

La queja, en un primer momento, fue inadmitida a trámite por exceder el Ayuntamiento su ámbito competencial. Sin embargo, dado que los hechos fundamentalmente descritos tenían que ver con la seguridad de las personas trabajadoras y de los residentes, finalmente el Síndic decidió investigar el caso. Para ello, la institución dio un mes tanto a la Vall d'Uixó como a la Conselleria de Servicios Sociales, Igualdad y Vivienda para adjuntar los correspondientes informes y detalles requeridos.

Durante el proceso, el Defensor del Pueblo detectó que, desde el año 2017, se había visto en inspecciones que el edificio presentaba diversas deficiencias como, por ejemplo, el incumplimiento del Plan de Autoprotección, la falta de accesibilidad de los timbres de llamada de aviso de los cuartos de baño, o la conclusión de que el edificio no cumplía con las condiciones específicas del uso hospitalario ni el programa funcional del centro se ajustaba a la normativa. 

El traslado de los usuarios a la residencia situada junto a la Colonia San Antonio

En medio de la 'batalla', el Ayuntamiento de la Vall d'Uixó, vista la "imposibilidad de diálogo con la Generalitat", tal y como informó el consistorio en un comunicado, y teniendo en cuenta que la actual residencia "no es de titularidad municipal, es antigua y no reúne las condiciones óptimas para prestar un servicio de calidad durante más años", decidió trasladar a las 64 plazas del Hogar Sagrada Familia a la nueva residencia de gente mayor situada junto a la Colonia San Antonio

El viernes 23 de mayo se produjo la apertura de la nueva residencia y se hizo efectivo el traslado de los 64 usuarios. La voluntad del consistorio es que "la solución sea solo un paso intermedio mientras la Generalitat construye una nueva residencia pública". Para ello, el Ayuntamiento ha puesto a su disposición una parcela municipal en el barrio Carmadai y su concejal de Servicios Sociales, Jorge Marqués, insiste en que "ahí debe estar el foco: en exigir y reivindicar esa residencia pública que la Vall d'Uixó necesita".

El Síndic de Greuges, visto que "las personas residentes han sido trasladadas a instalaciones temporales que cumplen las medidas de seguridad establecidas en la normativa vigente", considera "la situación que motivó la apertura de la presente queja de oficio ha quedado resuelta" y constata la falta de cooperación previamente comentada. 

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