CATARROJA (P. PLAZA/AGENCIAS). El subdirector de Emergencias de la Generalitat, Jorge Suárez, ha declarado ante la jueza que instruye la causa penal por la gestión de la dana que las llamadas que recibió la 'centralita' del 112 llegaron al Cecopi a través de informes técnicos que se trasladaron aquella tarde. Así lo han asegurado fuentes presenciales de la testifical de Suárez, el funcionario de mayor rango de Emergencias y que aquel día funcionaba como enlace entre la reunión de máximos responsables y el centro de coordinación de emergencias.
Suárez ha comparecido ante la instructora por segunda vez, dado que el pasado 4 de diciembre ya lo hizo durante cerca de ocho horas y fue imposible que todos los letrados personados concluyesen su interrogatorio. En esta segunda comparecencia, los abogados de las acusaciones han interrogado a Suárez sobre cómo se abordó la emergencia en los núcleos urbanos de l'Horta Sud aquel 29 de octubre de 2024. El 'cerebro' de Emergencias ha declarado ante la magistrada que la amenaza de colapso de la presa de Forata impidió centrar la atención en lo que sucedía en el barranco del Poyo y la comarca de l'Horta Sud.
Según han explicado fuentes conocedoras de su declaración, Suárez ha indicado que a partir de las 19:30 horas se tuvo constancia de la "generalización" de problemas en municipios como Picanya, Paiporta o Massanassa, pero que no recuerda que esa información llegase en relación con el barranco del Poyo, que recuerda municipios, no barrancos o ramblas. Este alto cargo ha afirmado que no se "conectaron" los incidentes con el cauce en el que se estaban produciendo.
Preguntado por el hecho de que los directores de la emergencia ya fuesen conscientes por la mañana de la especial relevancia del río Magro y de la rambla del Poyo, Suárez ha explicado que por la mañana se declaró la alerta hidrológica en ambas cuencas pero que por la tarde se había registrado un descenso del caudal del Poyo. El subdirector de Emergencias ha insistido en que conocieron de incidentes en el Poyo desde las 17.30h, pero que la atención estaba puesta en la presa de Forata y que eso impidió centrarse en el cauce que acabó asolando l'Horta Sud. De Buseo no se habló, ha manifestado.

- Suárez, a su llegada a los juzgados de Catarroja. Foto: EP
El subdirector de Emergencias ha ratificado que el presidente de la CHJ, Miguel Polo, "no informó" del aviso sobre el barranco del Poyo y que el Consorcio Provincial de Bomberos tampoco notificó que había retirado a la unidad que vigilaba dicho barranco. "Pesábamos que teníamos a los bomberos en los barrancos", ha asegurado.
Los debates "se alargaron en el tiempo"
Ha explicado también que, una vez constituido el Cecopi, a las 17 horas, él no tuvo información concreta de los casos que iban entrando en Emergencias, más allá de un mapa de calor con las zonas más afectadas. A pesar de esto, ha señalado que el Cecopi no estuvo aislado, sino que se comunicaba con la sala del 112. En relación a las medidas que se estudiaron para proteger a la población, Suárez ha explicado que inicialmente se planteó la posibilidad de la evacuación y después del confinamiento, medidas sobre las cuales se expresaron dudas legales.
Precisamente Suárez, junto al exinspector jefe del Consorcio Provincial de Bomberos de Valencia José Miguel Basset, son las dos personas sobre las que diferentes dirigente políticos han derivado la responsabilidad en la toma de decisiones el día de la dana. Sobre la redacción y el envío del Es Alert a la población a las 20.11 horas --cuando ya había numerosas víctimas mortales--, el testigo ha indicado que hubo debates que "se alargaron en el tiempo". Así, ha admitido que hubo "discrepancias" con Basset, que era desfavorable a la alerta por un "posible efecto estampida". Con todo, ha señalado que "una parte importante del retraso" se debió a las intervenciones de la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, aunque "hubo muchas personas" en "el proceso de preparación y elaboración" del ES Alert.
Los debates, ha explicado, llegaron hasta las 19.45h aproximadamente. "A partir de ahí, mecanizarlo lleva su tiempo", ha admitido, para añadir que "se perdieron segundos" al querer traducirlo al valenciano. También ha asegurado que la intervención de Pradas para revisar el mensaje "no supuso retraso" porque "fue un minuto".
Al respecto, ha insistido en que el presidente de la Diputación de Valencia, Vicent Mompó, tuvo un papel "activo" en la parte de avisar a los alcaldes e intervino cuando él planteó las correcciones en el mensaje en valenciano. Además, estaba interactuando con Pradas, ha dicho. Interpelado por si Pradas buscaba siempre un acuerdo general en el texto del mensaje y por si ello era necesario, el testigo ha dicho que "no" era preciso puesto que el Cecopi es un centro operativo y su función es el de asesoramiento y coordinación, pero "no sustituye a la dirección del plan", ha aclarado.
Además, ha afirmado que él tuvo conocimiento del primer fallecido alrededor de las 20:30 horas y que fue el entonces máximo responsable del Consorcio Provincial de Bomberos, José Miguel Basset, quien le informó, y que no recuerda que la consellera Salomé Pradas le informase de ello, a pesar de que la entonces titular de Justicia e Interior envió un mensaje al jefe de gabinete de Carlos Mazón con esta noticia más de cuatro horas antes, a las 16:28 horas.
Interpelado por qué no llegó al Cecopi durante la tarde la información actualizada de la CHJ sobre el barranco del Poyo, Suárez ha manifestado que esa información ni se le trasladó ni se puso en el grupo permanente. También ha dicho que la propia Confederación estaba en el Cecopi y no lo comunicó, siendo que era el emisor del mensaje. El testigo ha asegurado que abandonó el Cecopi a las 20.30 horas con la sensación de que estaban en un "desastre".