VILA-REAL (EFE). El Villarreal cierra 2025 con un complicado diciembre, en el que disputará cinco partidos que serán determinantes para sus aspiraciones de seguir vivo en la Copa del Rey y la Liga de Campeones y encaramado a la parte alta de la tabla en LaLiga. El primer partido de diciembre enfrentará este martes al Villarreal con el modesto Antoniano, conjunto andaluz de Segunda Federación. El equipo castellonense es claramente favorito, pero las amargas experiencias vividas en los últimos años obligan al Villarreal a no confiarse en una competición en la que no hay margen para enmendar cualquier error.
El Villarreal retomará LaLiga este sábado en La Cerámica con un encuentro siempre complicado ante el Getafe. El equipo de Bordalás, una de las revelaciones del campeonato, amenaza la racha del Villarreal en su estadio. El 10 de diciembre llegará la gran cita del mes, ya que el Villarreal se juega el todo o nada en la Liga de Campeones ante el Copenhague en La Cerámica. Ganar es imprescindible para mantener vivas sus pocas opciones de clasificación, ya que todo lo que no sea sumar los tres puntos ante el conjunto danés significará la eliminación virtual de la máxima competición continental.
El Villarreal regresará a LaLiga el 14 de diciembre con un duelo autonómico siempre especial ante el Levante, conjunto que acaba de cambiar de entrenador y que está obligado a sumar para escapar de la zona de peligro. El broche a 2025 llegará el día 21 con otro partido grande ante el Barcelona. El equipo de Marcelino García tendrá la opción de cerrar un gran año como local con un triunfo de prestigio y, de paso, ratificar su candidatura a pelear de nuevo por entrar en la Liga de Campeones el próximo curso.
