CASTELLÓ. El proyecto del corredor mediterráneo ha dado este fin de semana un paso decisivo con el inicio de las pruebas del nudo de Castellbisbal, un tramo clave para la conexión entre Valencia, Castelló y Tarragona. Los trabajos del eje ferroviario en ancho internacional encaran la fase final y el nuevo enlace desde Valencia a Tarragona estará operativo en 2027, tal como anunció el ministro de Transportes, Óscar Puente, en el último acto del foro empresarial de Quiero Corredor celebrado la semana pasada.

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ya ha llevado a cabo las pruebas en ancho internacional en el eje ferroviario de Castellbisbal, Martorell y el complejo de SEAT, utilizando una unidad de la serie 130. Esta fase constituye un paso previo al inicio de las circulaciones comerciales en ancho internacional mediante la inclusión del tercer carril.

“Hace más de 10 años que la conexión de ancho europeo para mercancías llegó a Barcelona, pero se quedó estancada ahí. Esto supuso un aislamiento para el resto peninsular, debido a que en el nudo de Castellbisbal no existía vía de ancho europeo. Durante los últimos cinco años se ha trabajado para superar este obstáculo, y podemos dar la buena noticia de que en 2026 Castellbisbal será ‘la puerta abierta a Europa’, para que nuestros territorios se conecten con el centro del continente”, destaca Josep Vicent Boira, comisionado del Gobierno para el Corredor Mediterráneo. Boira resalta que a lo largo de 2026 y 2027 se irán abriendo más vías en ancho internacional “en Martorell, Tarragona, Castelló, Sagunt, València, Almussafes… hasta llegar a Algeciras en los próximos años”.

De esta forma, desde el nudo de Castellbisbal se conectará con los tráficos del sur del corredor y con el norte hasta la frontera francesa. No en vano, Adif ha planificado los plazos de construcción del trazado de Castelló y Tarragona con el de Castellbisbal.

Para la implantación del ancho internacional, Adif ha desplegado en los 12 km del tramo Castellbisbal–Martorell 62 aparatos de vía de ancho mixto (tres de ellos cambiadores de hilo), renovando además 37 km de vías, empleando más de 6.000 toneladas de carril, 55.000 traviesas, 80 km de catenaria flexible y 5 km de catenaria rígida.

Último chequeo

Mientras tanto, Adif avanza con las obras del corredor previstas en València, Castelló y Tarragona. Entre la capital del Turia y Castelló está finalizando la implantación de un segundo tercer raíl, que permitirá un tránsito mixto, mientras que entre la capital de la Plana y Tarragona se ha optado por convertir el ancho ibérico en internacional. El ministro de Transportes anunció que en 2027 estará completo el corredor entre Almería y Francia. Ese año, aseguró, empezará a operar un nuevo AVE regional entre las tres capitales de provincia de la Comunitat Valenciana, así como el acceso al puerto de Castelló y el trazado de Tarragona.

En este sentido, son claves los avances en el cambio de ancho entre Xàtiva y La Encina, para conectar Valencia y Alicante en menos de una hora o València y Murcia en hora y media. Además, permitirá conexiones con otras ciudades importantes como Orihuela y Elche.

La obra del corredor ha experimentado un fuerte impulso en los últimos años, promovido por la presión del sector empresarial y la ayuda de los fondos europeos. Una decisión esencial fue su inclusión en la Red Transeuropea de Transporte. Así, el tramo Tarragona–Castelló–València ha pasado de tener un 21% de obras ejecutadas en 2016 al 78% en 2025. De hecho, el movimiento Quiero Corredor, promovido por la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), celebró su último encuentro la semana pasada, aunque advirtiendo que continuará vigilante con los compromisos de la Administración central.

Conviene tener en cuenta que el corredor que verá la luz en 2027 es una primera fase, que ha implementado el ancho internacional en el eje mediterráneo. En estos momentos está pendiente la ejecución de una nueva doble plataforma entre Valencia y Tarragona, una infraestructura considerada imprescindible para evitar un posible colapso de las vías cuando aumente el tráfico de mercancías.

En este sentido, el lobby Ferrmed advierte de que el corredor entre Valencia y Barcelona podría colapsar en cuatro años por falta de capacidad si no se ejecuta la doble vía. El ministerio mantiene en estudio esta propuesta, aunque sin concretar plazos.