CASTELLÓ. Poco más de dos meses después de que naciese Altadia, líder mundial en la fabricación de fritas, esmaltes y colorificios cerámicos, Lone Star, su propietario, ya sondea el mercado en busca de comprador. Según ha publicado El Economista, el fondo inversor estadounidense, que gestó este gigante tras sumar al grupo Esmalglass-Itaca-Fritta la división cerámica de Ferro (Ferro TCB), ya estudia la venta.
Para ello, y siempre según la citada publicación, Lone Star ya ha contactado incluso con Bank of America para que le asesore en una operación que, en todo caso, se encuentra en sus fases iniciales. De hecho, fuentes de Esmalglass han mostrado su sorpresa a este diario por la noticia, dado que el proceso de integración de la rama cerámica de Ferro en el nuevo conglomerado esmaltero todavía está lejos de ser completada.
Factura 800 millones
Este "globo-sonda", como lo califican fuentes consultadas, parece así un anzuelo con el que comenzar a rastrear en busca de comprador para Altadia, que tiene una facturación de unos 800 millones de euros, según informó el pasado mes de febrero, y que está dirigido por el ex vicepresidente mundial de Ferro TCB, Julio García. Aunque El Economista habla de hipotéticos compradores en el sector azulejero, la operación supondría todo un reto para cualquiera que se atreviera a llevarla a cabo, pues la misma publicación la valora, citando a fuentes financieras, en una horquilla de entre 1.500 y 2.000 millones de euros.