CASTELLÓ. La negociación del convenio del azulejo avanza a fuego lento y en la segunda reunión de este lunes patronal y sindicatos han mantenido sus diferencias. No obstante, ambas partes se han citado para el 26 de noviembre a fin de seguir abordando un marco laboral que ha de regular las condiciones de los 14.000 trabajadores del sector para los próximos tres años.

De entrada, Ascer y CCOO y UGT coinciden en pactar un convenio de largo recorrido, de tres años de plazo. Pero en el resto de medidas, especialmente en el tema salarial, el tiempo de la jornada laboral o la conciliación, continúan las discrepancias.

Las dos delegaciones han expuesto y defendido sus posiciones y, tras varios recesos y no llegarse a ningún punto en común, han optado por dar por finalizado el encuentro y emplazarse a otro dentro de dos semanas.

Posiciones de ambas partes

En materia salarial, Ascerpropone incrementos del 2% en 2026, del 1,5% en 2027 y otro 1,5% en 2028. También plantea la supresión de un concepto incluido actualmente en el plus de peligrosidad, un permiso por nacimiento de 19 semanas y se opone a una rebaja de la jornada laboral.

Mientras, UGT y CCOO abogan por un aumento de las retribuciones del IPC más un 1% por cada año de convenio, junto con una cláusula de retroactividad y una revisión salarial anual. También reclaman una paga de beneficios, como en verano y Navidad, y un plus para los trabajos de fines de semana y festivos, con una compensación de 60 euros los sábados, 70 los domingos y 80 en festivos.

En salud laboral, las centrales sindicales solicitan el reconocimiento del plus de tóxicos, mayores complementos por accidente de trabajo y la aplicación de la normativa sobre exposición a agentes cancerígenos, además de otras medidas preventivas.

Los sindicatos se han comprometido a negociar hasta final de año sin convocar actos de presión. Comisiones Obreras considera que, para garantizar “el futuro del sector cerámico en la provincia de Castellón, es imprescindible abordar los retos estructurales que afectan actualmente al mercado laboral”, como “la elevada edad media de la plantilla, situada alrededor de los 50 años, la falta de relevo generacional y la escasa incorporación de jóvenes al sector, y la necesidad de asegurar trayectorias laborales dignas, facilitando la jubilación en condiciones adecuadas de las personas trabajadoras de mayor edad”.

Por ello, propone una mejora salarial que permita “recuperar poder adquisitivo y asegurar salarios dignos acordes con la realidad económica”, mientras insta a avanzar hacia una jornada de 1.700 horas anuales y la implantación de un quinto turno.