CASTELLÓ. La residencia de mayores de Vilafranca, gestionada por la Fundación Gerón, celebra este mes su décimo aniversario desde que acogiera a sus primeros residentes a mediados de mayo de 2015. En esta década de trayectoria, el centro se ha consolidado como un referente en la atención a personas mayores en la comarca de Els Ports y como uno de los principales motores económicos y de empleo de este municipio y de esta zona de la provincia de Castellón

Actualmente, la residencia cuenta con 64 plazas residenciales para mayores y 11 de centro de día, todas ellas concertadas con la Generalitat Valenciana. El equipo humano del centro está compuesto por 52 profesionales que desarrollan su labor bajo el enfoque del modelo de Atención Centrada en la Persona, una innovadora metodología que pone en el centro de la intervención y cuidados los deseos, necesidades y preferencias de cada residente. De esta forma, para celebrar esta importante efeméride, la residencia organizó una comida de fraternidad que reunió a profesionales, personas usuarias y sus familias, en un ambiente cálido y festivo. El acto contó con la presencia de la alcaldesa de Vilafranca, Silvia Colom y con la entrañable actuación de la Rondalla del municipio, que puso la nota musical a una jornada muy especial.

Proyectos

La residencia desarrolla, además, dos programas financiados con subvenciones con cargo al IRPF del gobierno valenciano. En concreto los proyectos “Personas Mayores Conectadas”, que tiene como objetivo reducir el aislamiento social mediante el uso y acercamiento de nuevas tecnologías, y “Compartiendo Experiencias Intergeneracionales frente a la Soledad No Deseada”, que promueve el contacto entre personas mayores y escolares a través de actividades conjuntas con centros educativos del municipio y otras localidades.

También, a lo largo del año, se organizan numerosas actividades terapéuticas y de ocio, como musicoterapia, psicomotricidad, talleres de autonomía personal y estimulación cognitiva, todas orientadas a mejorar el bienestar físico, emocional y social de los y las residentes. Este décimo aniversario supone no solo una ocasión para celebrar el trabajo realizado, sino también para reforzar el compromiso de la residencia con el cuidado digno, cercano y profesional de las personas mayores de Vilafranca y su entorno.