Colorker y Saniceramic se estrenan en feria como un único grupo empresarial con diferentes marcas

VALÈNCIA. Colorker se ha convertido en una de las firmas protagonistas de esta edición de Cevisama no tanto por su vuelta a la feria tras permanecer ausente durante varios años, sino por el reciente acuerdo de integración que ha llevado a cabo con otra de las firmas referentes del sector, como es Saniceramic. Esta fusión de empresas ha permitido que ambas compañías ganen músculo y potencia en un sector donde la concentración empresarial se ha convertido en algo habitual para favorecer cotas de competitividad en un mercado internacional cada día más complejo.

El consejero delegado de Colorker, Manuel Ángel Murillo, detalla a Castellón Plaza algunas de las claves de esta decisión que ha reposicionado a las dos compañías bajo una misma propiedad. "Se trata de una integracion de dos compañías -explica Murillo- para lo que Colorker ha adquirido el cien por cien de las participaciones de su capital. Lo que hacemos es integrar a la familia propietaria de la primera empresa en el accionariado de la segunda".

El principal motivo que ha llevado a las dos empresas a tomar la decisión estriba en la necesidad de crecer. Tal como explica el consejero delegado de Colorker, "estamos sometidos a un cambio tecnológico permanente, de tendencias, regulaciones que son cada vez más importantes para el sector. Esto se da en un contexto de grandes concentraciones empresariales, dirigidas a incrementar el tamaño de las compañías, con las ventajas que eso supone en aspectos que tienen que ver con la reducción de costes de producción y la apertura y consolidación de mercados desde un punto de vista más competitivo", detalla.

Por otra parte, según explica Murillo, "de manera transversal, estas concentraciones también favorecen a las unidades de negocio comerciales".

Complementariedad

"En nuestro caso -argumenta Manuel Ángel Murillo- Saniceramic y Colorker aportan varias marcas comerciales, que se complementan desde el punto de vista de su posicionamiento tanto en términos de negocio y propuesta de valor. También en lo que concierne a geografía, entendiendo ésta como el posicionamiento que cada marca está asentada en cada mercado". Según entiende el directivo, "Colorker e ITT tienen mercados absolutamente complementarios. Colorker tiene un mejor posicionamiento en el mercado europeo, en el español; mientras que ITT tiene una mayor presencia en Oriente Próximo, en Asia están haciendo cosas muy interesantes.

Según detalla Murillo, "Colorker e ITT serían las firmas generalistas en el ámbito comercial. Por un lado tendríamos Zys y Creative, que están orientadas a piezas más pequeñas; y de otra parte estaría Arklam, de Saniceramic, que es la marca especializada en el producto de las láminas en formatos grandes y aquellos formatos que tienen que ver con las encimeras, el mundo del mueble, etcétera".

La idea organizativa del grupo, según el responsable de Colorker, es disponer de dos unidades de negocio, de índole comercial, cada uno con las marcas que provienen de cada una de las compañías; y lideradas por las personas y directivos que lo han venido haciendo a través de Colorker y Saniceramic. "Después, ofreceremos una serie de servicios transversales de grupo, donde ahí estarán las operaciones de fabricación, por supuesto, que darán servicios a las dos unidades comerciales, además de compartir otros departamentos como los recursos humanos o la formación, entre otros aspectos".

Un proceso "natural"

Para el consejero delegado de Colorker, a operación ha sido un proceso muy natural porque la colaboración entre ambas empresas viene de muchos años. "Era una relación de fabricación por parte de Colorker para la marca ITT, fundamentalmente; y con el tiempo identificamos que las formas de entender el mercado, el sector, eran coincidentes en muchos términos y, finalmente, determinamos la posibilidad de dar un paso más en esta colaboración hasta llegar hasta donde hemos llegado".

Para el directivo cerámico, "ante la nueva realidad del grupo empresarial, tenemos que volver a mirar el espectro de necesidades que se nos plantea con esta nueva estructura y aportar las soluciones más eficientes a cada una de estas necesidades. Tenemos que empezar a trabajar en ese sentido desde la serenidad desde este nuevo grupo empresarial".

En cuanto a plazos, Murillo señala que "hasta el verano tenemos tiempo de trabajar en la integración de los equipos, aunque no queremos imponer plazos, porque lo importante es llevar a cabo las sinergias lo más efectivas  y rápidas posibles".

En lo que respecta a la proyectada sede de Colorker en el hotel Simba, en Xilxes, "el asunto sigue ahíy tendremos que ver cómo acomodamos esta fórmula a las necesidades del nuevo grupo empresarial. Porque las unidades de negocio van a seguir siendo independientes, cada una con su ADN".

En lo que concierne a cómo ven la feria Cevisama en esta vuelta de Colorker al salón de la cerámica, "hemos visto una evolución enorme, con aportaciones muy interesantes en lo que tiene que ver en la relación con el cliente o la difusión del conocimiento, entre otros aspectos.