CASTELLÓ. Este jueves 3 de noviembre, David Broncano empezaba la grabación de su programa «La Resistencia» sin saber que esa noche le esperaba entre el público un invitado muy especial. "Ha venido Dios a vernos y flipasque es negro" le revelaba una persona del público. "¡Qué inquietante!" contestaba Broncano a la vez que pedía conocerlo. Este "Dios negro" estaba en el anfiteatro y, para que el encuentro fuese más divino, le hizo entrega de un regalo con un ceremonioso, "toma, hijo mío".
Esto, que podría quedar como una anéctoda celestial, supone un hecho "de gran relevancia", según el presidente de Conquistando Escalones, Abrahán Guirao, para la Asociación porque la labor de la entidad pudo tener unos minutos de visibilidad en un "altavoz" tan potente como es «La Resistencia». Tras años intentándolo, ayer, por fin, Guirao consiguió asistir como público al programa del de Jaén y hacerle entrega de un regalo para"agradecer la visibilidad que nos has dado".
Y es que, ese "Dios negro" no es otra persona que el asistente personal de Guirao, quien le hizo llegar a Broncano un diploma en el que se le ha nombrado socio honorífico de Conquistando Escalones en el que también se podía ver una caricatura del presentador escalando. "Hace años me entrevistaste en La vida moderna y estábamos empezando las investigaciones, ahora, estamos cerca de los ensayos clínicos", relató el presidente a Broncano.
El presentador, quien recordaba a Guirao, celebró que las investigaciones médicas estuvieran en este punto y, tras mostrar el diploma enmarcado lo dejó en su mesa convertida en un lugar de culto para los incondicionales del programa. Además, tuvo una breve charla con el presidente, en la que Guirao le explicó el contenido de su canal de Twitch, donde, además de otro contenido, entrevista a famosos, con el objetivo de recaudar fondos para las investigaciones médicas que buscan tratamiento y cura para la Distrofia Muscular de Cinturas 1F/D2 y el VIH.
Así, que aprovechó la oportunidad para invitar a Broncano a pasarse por ahí "para charlar un rato o conversar contigo un especial de Navidad que estoy preparando". El presentador aceptó la invitación con el sarcasmo que le caracteriza "si pueden ser tres minutos, sí".