CASTELLÓ. Construplas sigue creciendo. La empresa fabricante de elementos de baño de la marca Acquabella celebra su 25 aniversario con la inauguración de unas nuevas instalaciones dedicadas a I+D+i. La compañía pretende convertir el recinto en un centro de vanguardia para desarrollar nuevos diseños y prototipos y para ello alberga distintos laboratorios, destacan fuentes de la misma.
La inversión supone una mejora tecnológica con la que se dota a la planta de este fabricante de platos de ducha, encimeras, paneles, lavabos y demás elementos de baño de un mayor grado de versatilidad y eficiencia, destacan las fuentes.
El presidente de Construplas, Juan José Benavent, ha sido el encargado de actuar como anfitrión en la apertura del centro, a la que han asistido diferentes autoridades, como la alcaldesa de la Vall d'Uixó, Tania Baños, y el director del Institut Valencià de Finances, Manuel Illueca.
Con el centro de I+D+i concluye la segunda fase del plan de expansión de la compañía, fijado a tres años vista y que comprende una inversión de 6 millones de euros. La siguiente fase consiste en la ampliación del almacén: un nuevo centro logístico que supone un incremento de más de 2.000 metros cuadrados respecto a las instalaciones actuales, algo que prevé comenzar a materializar este mismo año.
El proyecto culminará con una cuarta fase: la construcción de una nueva fábrica, que pondrá fin al proceso de ampliación y digitalización de la línea de fabricación de platos de ducha automática. Con este plan inversor, los dirigentes de Construplas prevén triplicar la producción de la compañía.
"Estamos ante el inicio de una nueva era en Construplas. La innovación es la piedra angular de nuestra filosofía. Por ello, la aplicación de la industria 4.0 supone un paso más en la consecución de una fábrica inteligente y la búsqueda de la excelencia en nuestros productos y servicio al cliente", ha señalado Benavent acerca de la transformación tecnológica de la empresa.
Con su fiel compromiso por la innovación y la mejora continua, Construplas se ha convertido en todo un referente en la Vall d’Uixó, señalan desde la firma. Tras una avalada experiencia exportadora con presencia en más de 40 países, la compañía vinculada a la azulejera Keraben hasta 2016 ha triplicado su facturación en los últimos 6 años (en 2017 las ventas fueron de 18,5 millones de euros) y emplea a alrededor de 200 trabajadores.