CASTELLÓ. La feria Coverings ha cerrado este viernes sus puertas después de tres intensas jornadas y lo ha hecho con una buena acogida en cuanto a asistencia de agentes comerciales y en medio de una buena perspectivas de ventas. De las 330 compañías presentes, 40 empresas son españolas y una treintena de ellas exponían bajo el sello de Tile of Spain, cuyo pabellón ha sido de los más visitados a lo largo de estos días.
El optimismo ha sido, de este modo, casi generalizado entre las empresas azulejeras españolas, cuyos productos se han beneficiado de manera notable por la práctica desaparición del mercado estadounidense de las baldosas chinas, a consecuencia de las sanciones que las autoridades de aquel país mantienen sobre los productos azulejeros del gigante asiático. Las previsiones recogidas a pie de stand señalan así un buen desarrollo de una feria que ha supuesto un "soplo de aire fresco, ya que el sector ya echaba en falta este tipo de acontecimientos tras más de un año de parón por la covid", tal como apuntan dos responsables comerciales de sendas empresas castellonenses.
Pese a la numerosa presencia española, la mayoría de agentes y visitantes presentes en el salón proceden de delegaciones de empresas españolas arraigadas tanto en el mercado estadounidense como en el resto del continente americano, tanto de México, como Sudamérica, según apuntan algunos de estos agentes que ya emprenden de vuelta hoy a sus lugares de origen.
Y en cuanto a las medidas de prevención ante la covid, todos coinciden en señalar que los protocolos han funcionado con normalidad, pese a que se trata de la primera gran cita del calendario en la industria del azulejo. La pandemia, eso sí, se ha dejado notar por un notable descenso del público en general, la reducción de los espacios, el menor número de stands y la reducción en una jornada en cuanto a la celebración con respecto a lo que venía siendo habitual en la última edición antes de la covid.