CASTELLÓ. La agrupación de Ciudadanos Castelló vive en el limbo organizativo desde la celebración de sus primarias para elegir una nueva junta local. A pesar de que oficiosamente Juan José Povedano ejerce como coordinador desde el pasado 27 de febrero, cuando derrotó a Lamberto Sánchez en las urnas por apenas cuatro votos de diferencia, lo cierto es que el cruce de impugnaciones entre ambas candidaturas impide a Madrid validar los resultados, con el consiguiente desajuste estructural.
La Comisión de Garantías, que debe resolver el conflicto, sigue sin pronunciarse más de un mes y medio después de recibir las reclamaciones. Esa indefinición provoca una situación de desgobierno en el principal colectivo naranja en la provincia de Castellón. Sin dinamismo orgánico, la actividad se limita a la acción institucional, lo que supone un contratiempo para rearmar el partido liberal con el propósito de sobreponerse a los continuos varapalos por el desmoronamiento nacional. Un desplome acentuado con las últimas fugas de referentes, como la marcha del líder autonómico Toni Cantó al PP, quien unos días antes de abandonar las filas de Cs se desplazó hasta la capital de la Plana para, dentro de su agenda, arropar al equipo ganador del sufragio.
El bloqueo de la agrupación de Ciudadanos Castelló es tal que ni siquiera tiene activada su plataforma interna, actualmente inhabilitada, y que resulta esencial a fin de normalizar los canales de comunicación con los afiliados. El silencio de Madrid genera todavía más incertidumbre si se tiene en cuenta el periodo estipulado por los estatutos para dirimir sumarios disciplinarios: hasta el medio año.
Así lo recoge el artículo 131, que en su punto 1 señala que "el expediente sancionador se tramitará en el plazo seis meses a contar desde su inicio, salvo que los hechos enjuiciados revistan especial complejidad, en cuyo caso el plazo para la resolución podrá prorrogarse un mes más". En el epígrafe tercero se precisa que "finalizado el periodo sin resolución expresa, el órgano competente procederá al archivo del expediente y de las actuaciones".
Esto quiere decir que, de persistir la imprecisión de Garantías sobre los recursos, la junta local presidida por Povedano no será proclamada hasta agosto. Fuentes del partido liberal creen improbable que la comisión se pronuncie en las próximas semanas a consecuencia de las elecciones regionales de Madrid, que se celebrarán el 4 de mayo. Incluso, van más allá y advierten que, dependiendo de los resultados, el lío de Castellón podría permanecer olvidado en un cajón.
Cabe recordar que las impugnaciones no solo cuestionan la validez y pulcritud de las candidaturas. En el caso de la formalizada por la denominada lista continuista, que terminó imponiéndose, se pide además la repetición del plebiscito, lo que, según fuentes consultadas, complica aún más un posible veredicto. De hecho, el escrito solicitaba en su momento la suspensión cautelar de la votación, a la espera de esclarecer las posibles irregularidades cometidas por la otra corriente, auspiciada por la coordinadora provincial, Cristina Fernández, vulnerando supuestamente varios apartados del reglamento.