CASTELLÓ. El Gobierno reitera su negativa a iniciar una investigación que pudiera desembocar en la aplicación de la cláusula de salvaguarda que proteja a la naranja autóctona frente a la sudafricana. Como ya hiciera hace unos meses, el Ejecutivo estatal ha negado esta posibilidad porque no considera "que se den las circunstancias para solicitar el inicio de una investigación de este tipo".
En una nueva respuesta al senador castellonense de Compromís Carles Mulet, el Ministerio apunta que, en la presente campaña, "no se ha producido un aumento significativo de las importaciones originarias de Sudáfrica y sus precios son similares a los de los últimos años", una tesis que viene esgrimiendo desde el principio, cuando las quejas de los agricultores eran habituales y unánimes debido al desplome de precios en la campaña pasada, la 2018/2019, terrorífica para el tejido agrario valenciano.
En este sentido, el Gobierno destaca el aumento de las cotizaciones en la presente campaña, con incrementos "significativos respecto a la pasada campaña, tanto en campo como a salida de central". De hecho, para el caso de las clementinas resalta que las cotizaciones "alcanzan en árbol valores máximos para los últimos 9 años", mientras para el limón son las segundas más altos de este periodo y para las naranjas las terceras.
En su respuesta escrita, el Gobierno no entra a analizar el motivo de estos aumentos, ni siquiera recuerda la producción récord de la pasada campaña y la mínima de la presente, motivo principal para el incremento de precio, lo que tampoco ha tenido un reflejo desmesurado para las naranjas. En este contexto, el Ejecutivo tan solo señala que "no puede establecerse una relación directa, y menos en exclusividad, entre las importaciones de cítricos en la Unión Europea procedentes de terceros países con los que la UE tiene acuerdos comerciales y los precios del mercado de cítricos".
Desde Madrid recuerdan las causas que Bruselas exige para iniciar una investigación y señala que estas no se producen ahora mismo, aunque, como en el pasado, reconocen que "sí parece necesario el seguimiento de las importaciones de Sudáfrica y de otros países terceros, así como de otros elementos que puedan perturbar la situación del mercado para cítricos", sin llegar a ninguna conclusión más.
Esto ha tenido respuesta por parte de Mulet, quien ha reprochado al Gobierno que dé, "de nuevo, la espalda a los cítricos". Según el senador nacionalista, desde el Gobierno obvian que la solicitud de la cláusula de salvaguarda no solo se puede iniciar "por la alteración de precios de mercado, o del volumen de importaciones", para lo cual ya hay motivo, "tal y como reconoce el sector pero niega el Gobierno". De hecho, para la campaña que ahora inicia, la patronal de exportadores sudafricanos espera incrementar en un 13% sus exportaciones y la Unión Europea, como la misma asociación reconoce, es su principal destino.
Pero es que, además, recuerda Mulet, la cláusula de salvaguarda "se podría exigir igualmente por la amenaza real que suponen las importaciones detectadas con plagas o con materiales fitosanitarias prohibidas en la Unión Europea".
