CASTELLÓ. Zyssa Resorts, la matriz del grupo turístico encabezado por el hotel Agora Spa & Resort, ha logrado superar el concurso de acreedores en el que vivía desde mediados de 2017. La firma, y su hermana Vacaciones y Turismo, acaban de salir de la fase de administración, según ha decretado el Juzgado de lo Mercantil nº1 de Castellón, "tras satisfacer íntegramente la deuda" con sus acreedores, tal y como recoge el auto y destaca el propietario de ambas, Pascual Lloret.
Lo ha hecho tras llegar a un acuerdo con el que ha evitado, incluso, la fase de convenio del concurso voluntario, indica Lloret. Para el pago de la deuda, la mayoría en manos de los fondos que se la compraron a Bankia y Caixabank, los acreedores iniciales "más importantes", recuerda el empresario, el grupo ha debido vender "apartamentos y terrenos en la zona norte y sur de Peñíscola". No en vano, en su día compró una buena superficie en el límite del parque natural de la Serra d'Irta, donde se proyectó un puerto deportivo para 800 amarres diseñado por Ricardo Bofill.
Además de la venta de propiedades "a buen precio", el acuerdo también incluye "una operación de leasing a 15 años" con Cajamar por valor de "unos 20 millones de euros", apunta Lloret.
La desinversión de activos no incluye el solar en que se ubicaba el matadero de Vinaròs y que se adjudicó el grupo en 2006 por 8,7 millones para construir un hotel de 14 plantas y 250 habitaciones. Respecto a ello, Lloret señala que el proyecto está parado después de que se estudiase la posibilidad de impulsarlo. En todo caso, el empresario peñiscolano niega que la deuda que llevó al concurso al grupo provenga de esta operación, sino que se derivó de la exigencia inmediata de los fondos por cobrar la deuda que compraron a las entidades financieras: "Los fondos quieren el dinero inmediatamente", apunta al respecto.
No en vano, Zyssa Resorts, nacida hace 17 años y medio, invirtió 40 millones para poner en marcha el hotel Agora, que inauguró en 2008; y posteriormente otros 15 para la compra del Agora Juan de Austria, en Madrid.
Tras todo ello, la buena noticia -"seguimos vivos", destaca Lloret- se produce en un momento además especialmente complicado para el sector turístico debido a la afección de la pandemia sanitaria. En este sentido, el grupo, que cuenta entre sus activos con las 315 habitaciones del Agora Spa & Resort, de categoría 4 estrellas superior, y las 46 del Juan de Austria, dispone además de "25 apartamentos en Peñíscola", distribuidos en las urbanizaciones Atalayas, Atalayas Suite, La Volta, La Volta II y Mar.
En conjunto, el grupo da empleo a 145 personas en temporada alta (130 de ellas en el hotel peñiscolano) y a unas 40 en temporada baja. Ahora, espera volver a emplear a todas ellas "hacia mayo o junio", apunta su propietario, una vez que las vacunas hayan hecho su efecto y la afección del virus decaiga.
Lloret descarta de esta manera la reapertura "en Semana Santa para volver a cerrar después". No abrirá de momento ni tan solo en Madrid, donde el hotel lleva cerrado "un año" debido a la caída del volumen de turistas en la capital española. Pese a todo, "vamos a mantener el personal", asegura el propietario a este respecto.