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los portavoces de municipios como borriana, nules, la vall o almassora están bajo lupa

El PPCS concentrará una renovación en el ámbito municipal a partir del congreso provincial de 2021

4/08/2020 - 

CASTELLÓ. La dirección del PPCS concentrará una renovación en el ámbito local a partir del congreso provincial, previsto para la primavera de 2021. El cónclave, a menos de un año vista, ya se vislumbra determinante para el futuro de muchos de los actuales portavoces. Aunque es cierto que se debatirá y elegirá una nueva junta directiva y comité ejecutivo -Miguel Barrachina sigue sin dar pistas sobre su continuidad como presidente-, el calado de las decisiones precipitará un cambio de rumbo en muchos de los grupos municipales para comenzar a trabajar en clave electoral.

El camino abierto por Héctor Folgado en Vila-real para impeler una renovación, al anunciar que no repetirá como alcaldable, servirá como ejemplo en aquellas localidades donde actualmente no gobierna la derecha. Sobre todo si se tratan de feudos de gran tradición popular y que se han ido perdiendo desde 2015 por el avance de la izquierda y las alianzas progresistas.

Ahora mismo hasta siete grandes municipios de la provincia estarían bajo la lupa del partido. En concreto, Nules, Vall d'Uixó, Borriana, Almassora, l'Alcora, Benicarló y Vinaròs, cuyos líderes son: María Victoria Marzal, Carolina Castelló, Juan Fuster, María Tormo, Vicente Mateo, Juan Antonio Mañá y Juan Amat, respectivamente.

El PPCS, a instancias de lo que marca Génova, entiende que para recuperar crédito en los próximos comicios habrá que apostar, en algunos casos, por gente nueva. Al menos, por candidaturas que transmitan frescura al electorado, de manera que resulte posible consolidar la hegemonía plebiscitaria (Peñíscola y Vall d'Alba) o invertir la tendencia (Segorbe y Onda).

Romper moldes

Precisamente las alcaldesas de estas dos últimas localidades, la segorbina Mari Carmen Climent y la ondense Carmina Ballester, simbolizan esa regeneración que tanto reclaman varios sectores dentro de la formación de derechas. Esas mismas voces interpretan que sus sonadas victorias en las pasadas elecciones constataron la necesidad de romper moldes para abrir una nueva etapa, tesis que se ha instalado en el seno de la dirección nacional a raíz del triunfo de Pablo Casado como presidente en sustitución de Mariano Rajoy.

Lo que resulta evidente es que lo sucedido en los recientes congresos provinciales de Alicante y Valencia es un anticipo de lo que está por venir, siendo 2021 un año clave tanto para el PPCV como para el PPCS. 

Los aires de cambio parecen inevitables. No en vano, en ello se está trabajando desde hace semanas. Los movimientos internos se suceden con encuentros informales. Eso sí, siempre supeditados a lo que disponga Madrid a partir de septiembre en un otoño que se presume intenso.

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