CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló ha sustituido las señales que informan de las restricciones de vehículos en el centro de la ciudad por otras que "ocultan a los conductores y conductoras que accedan sin autorización que tendrán una sanción inmediata". Jorge Ribes, concejal responsable de Movilidad del Grupo Municipal Socialista, ha denunciado la "tomadura de pelo de la señora alcaldesa, Begoña Carrasco, que durante cuatro años nos estuvo acusando de implantar el Gran Hermano en el centro y ahora nos está demostrando sus engaños y promesas al aire".
Ribes denuncia las nuevas señales que ha instalado el gobierno del PP y Vox en las vías de acceso a las zonas peatonales del centro de Castelló, una señalética similar a la que se instaló en su día para advertir a los conductores de un control de las matrículas por medio de cámaras de vigilancia, "pero con un pequeño detalle que supone, sin duda, un absoluto fraude para los conductores". Así, si en las anteriores señales quedaba claro que el acceso sin autorización a la Zona de Bajas Emisiones "implicaba una denuncia automática", ahora esa información se ha eliminado, "dejando solo el mensaje de que el acceso se limita a vehículos autorizados".
Para Jorge Ribes, "estamos ante un engaño a los y las castellonenses de gran calado, en especial porque la señora Begoña Carrasco ha estado meses y meses anunciando que iba a apagar las cámaras, lo volvió a decir tras su investidura como alcaldesa el 17 de junio y su posterior pacto con la ultraderecha y, ahora, la realidad es que se ríe de los vecinos y vecinas y elimina la advertencia de sanción inmediata a los conductores, sanción que se sigue aplicando". La conclusión clara es que Carrasco "genera confusión, porque muchos vecinos piensan que a día de hoy no hay sanciones, cuando siguen existiendo".
El concejal socialista, en esta línea, recuerda la "peligrosa actitud del gobierno de la derecha y la ultraderecha que está en el ayuntamiento, capaz de ir en contra de Europa y capaz de volver a meter coches en el centro", todo ello para frenar "los avances que hemos hecho desde el PSPV por lograr una ciudad para los peatones y sensibilizada para hacer frente al cambio climático".
Según Ribes, "su decisión de realizar cambios en la Zona de Bajas Emisiones, y de ese hipotético apagado de cámaras que ahora parece que no tiene claro, implicaría iniciar una peligrosa espiral que puede hacernos perder millones de euros de los fondos europeos".