CASTELLÓ. El volumen de licencias de actividad e instrumentos ambientales para negocios no para en Castelló pese a la covid-19. A pesar de que el ritmo resulta ostensiblemente inferior respecto a los meses previos al coronavirus, las solicitudes continúan llegan al Ayuntamiento de la capital de la Plana. Según explica el portavoz del gobierno municipal, José Luis López, en la última quince de agosto se tramitaron siete permisos para distintos establecimientos, la inmensa mayoría de cadenas de alimentación, pero también de autónomos, dispuestos a emprender una nueva aventura profesional en plena pandemia.
La Junta de Gobierno Local aprobó este viernes autorizar la apertura de zona de restauración y café-bar en las tiendas de Mercadona ubicadas en las calles Jover con Toni y Maestro Falla con Carcagente. La tercera licencia para un supermercado beneficia a la plataforma comercial Aldi, avalando el aparcamiento del local situado en la avenida Casalduch.
Otras concesiones corresponden a un estudio de tatuajes, una oficina de servicio de asistencia en el hogar y almacenamiento y tratamiento de graneles sólidos en la dársena sur del puerto. Además, se suma una modificación estructural del Hotel del Golf para adaptación del sistema eléctrico.
"En meses de pandemia han ido pasando algunas licencias", explica López, que destaca la reconversión de muchas panaderías, incorporando el servicio de cafetería, para hacer frente a la crisis por la covid-19.
Al respecto, el Ayuntamiento activa una nueva línea de ayudas dirigida a comerciantes, autónomos y microempresas por un importe de un millón de euros. "La partida está abierta y puede dotarse de más cantidad si se agota", precisa el portavoz del ejecutivo local. Cada solicitante podrá aspirar a un máximo de 1.200 euros.