Foto: ROBER SOLSONA/EPVALÈNCIA (EP). PSPV, Compromís y Unides Podem defienden que lo importante es que este miércoles se aprobarán los presupuestos de la Generalitat para 2022 y no que lleguen con retraso respecto al calendario previsto, mientras la oposición asegura que el pacto de gobierno está "roto desde hace tiempo" y que esto "solo les desprestigia a ellos".
Así lo han trasladado representantes de los seis grupos de Les Corts antes de la junta de síndics, a un día de la reunión extraordinaria del Consell que aprobará las cuentas. Fue un acuerdo que alcanzó el sábado la nueva comisión política encargada de elaborar las cuentas, con el objetivo de que la tramitación parlamentaria acabe antes de fin de año para así evitar prorrogar los presupuestos actuales.
Como síndic socialista, Manolo Mata ha reconocido que el retraso "no está bien" y "hubiera sido deseable" evitarlo, pero ha confiado en que se podrá subsanar durante el trámite parlamentario y hecho hincapié en que lo importante es que las cuentas estén vigentes el 1 de enero y no sean unos presupuestos "prepandemia".
Ha descartado así que la comisión política no haya funcionado, garantizando que la prioridad es el contenido y que el Botànic "se va a poner de acuerdo mal que les pese" a PP, Cs y Vox. "Si nos pasamos el día hablando de la metodología, esto parece una asamblea de la facultad", ha ilustrado Mata, para añadir que los gobiernos de coalición son difíciles y que "más complicado lo tienen en Andalucía que van a elecciones".
Fran Ferri (Compromís) ha coincidido en que "lo importante no es el cómo ni el cuándo" y ha remarcado que los presupuestos se aprobarán "en tiempo" y mantendrán el nivel de gasto social, algo que ha asegurado que fue un "mantra" de los tres grupos en la comisión política.
Según ha explicado, el principal escollo fue cómo cuadrar esta prioridad con la infrafinanciación autonómica, la deuda histórica y la disminución de ingresos por la eliminación del fondo covid del Gobierno. Ferri también cree que el Botànic ha innovado con la comisión interna y que no hubo división porque todos los años "cada conselleria y cada grupo pone encima de las mesas las prioridades".
También se ha mostrado satisfecha la portavoz de Unides Podem, Pilar Lima, afirmando que "unos días de retraso no es lo más importante" y que los tres socios aportaron iniciativas. Ha celebrado especialmente el "incremento histórico" en la Conselleria de Arquitectura Bioclimática, sin cuantificarlo pero garantizando que será "considerable".
"Hay un cambio", ha aseverado, para negar que se haya "forzado" la aprobación de presupuestos porque el objetivo es que fueran "los mejores para los valencianos". Mientras "en Andalucía y en Madrid se han prorrogado", Lima ha insistido en la "capacidad política" del Botànic para llegar a un acuerdo y ha ironizado con que decir que el tripartito está roto "es un sueño húmedo de la derecha".
Entre la oposición, el portavoz adjunto del PP Miguel Barrachina ha denunciado que el Botànic "incumple el Estatut d'Autonomia" y se ha preguntado si el retraso se debe a las discrepancias por implantar una tasa turística, por el "tantas veces prometido cambio de modelo de financiación" o por el "cabreo" entre la vicepresidenta portavoz, Mónica Oltra (Compromís), y el conseller de Hacienda, Vicent Soler (PSPV).
Pero ha advertido que "cada pelea del Botànic tiene una única víctima: los valencianos", algo que ha ligado con la petición de Compromís de demoler la ampliación del puerto de València o con la "exclusión" de Carlos Mazón --presidente del PPCV y del patronato de turismo de la Costa Blanca-- de una reunión con agencias de viaje en la World Travel Market de Londres. "Esto solo se supera votando", ha zanjado el 'popular'.
De Ciudadanos, Ruth Merino ha afeado al tripartito el "desprecio a las instituciones" con un retraso que ha definido como una tragicomedia y una negociación que "siempre acaba al límite y con broncas, protagonizadas principalmente por Soler y Oltra". Esto demuestra, a su juicio, que prevalecen los "egos, personalismos y partidismos" antes que el bienestar de los ciudadanos.
La síndica 'naranja' ha lamentado que este año han ido "un paso más allá" cometiendo el "acto irresponsable" de no aprobar el proyecto de presupuestos como marca el calendario, además de alertar que sienta "un precedente peligroso y sobre todo les desprestigia a ellos". "Claro que es importante el cuándo, no solo el qué como quiere hacernos creer Oltra", ha recalcado.
Y de Vox, Ana Vega ha rechazado el retraso porque cree que demuestra que el Botànic está "completamente roto" y que "no confían en unos y otros". También ha descartado que sean los presupuestos más expansivos porque lo ha ligado con una subida de impuestos para "volver a beneficiar a sus chiringuitos y al estado del bienestar político", por lo que ha prometido votar en contra tras estudiarlos "minuciosamente".
