CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló cambia de estrategia a fin de garantizar el mayor número de paradas abiertas en el Mercat de Sant Antoni. Tras descartarse la instalación de una churrería y ante las dificultades para asignar los cinco mostradores desiertos (el 50% del total), el equipo de gobierno plantea invitar a empresas locales con el objetivo de captar su interés e "intentar una adjudicación directa".
Según explica el portavoz del gobierno municipal, Vicent Sales, "exploramos esa posibilidad para que queden los menos puestos vacíos". En este sentido, no se descarta ahora la idea de abrir espacios gastronómicos, alternativa que se contempla además en el pliego de explotación. "Si alguien quisiera establecerse, lo miraremos", subraya.
El pasado 11 de enero, la Junta de Gobierno Local aprobó la adjudicación de las paradas 3, 6 ,7 9 y 10 por un periodo de explotación de 10 años. El acuerdo contempló el establecimiento de dos fruterías-verdulerías, una pescadería (dos mostradores) y un local de salazones. Los demás puntos de venta se quedaron libres por no haber suficientes licitadores.
Bien es cierto que el Ayuntamiento barajó concretar más adelante la gestión de al menos tres puestos a tenor de la pretensión de un concurrente excluido de montar un establecimiento de conservas y productos similares. Asimismo, quedó pendiente la autorización de una churrería (dos tenderetes), que se encontraba en ese momento en negociaciones con vistas a obtener un permiso sobre el horario (levantar la persiana por las tardes y el domingo). Sin embargo, ninguna de las operaciones cuajó.
En septiembre de 2023, y al finalizar la anterior concesión administrativa, el Ayuntamiento sacó de nuevo un concurso público. Las bases recogieron como novedad la opción de montar negocios distintos a los tradicionales comercios de alimentación.
Del mismo modo, fijaron un canon anual al alza por punto de venta de 1.083,60 euros. El plazo máximo de explotación se situó en 10 años. Tras el cierre de presentación de ofertas, se postularon seis interesados, que pujaron por distintos mostradores.
El Mercat de Sant Antoni se encuentra en la plaza del Maestrat y ocupa una superficie de 375 metros cuadrados. Construido hace más de 60 años, cuenta con 10 puestos, aunque no todos ofrecen servicio por falta de rentabilidad. Un problema que se viene repitiendo desde hace años.