CASTELLÓ. Los grupos FCC y Clece se disputan el contrato de 7,5 millones de euros para la limpieza de los 73 edificios y dependencias municipales. Las dos compañías son las únicas que han presentado ofertas tras el cierre del plazo. Ahora, los técnicos del Ayuntamiento de Castelló analizan las plicas con la documentación de las concurrentes y sus propuestas económicas para iniciar la baremación.
De acuerdo con la financiación plurianual, la adjudicación debe resolverse durante diciembre, dado que para este año ya se recoge un primer importe de 156.402,87 euros por la prestación. Según el gasto plurianual, el periodo obligatorio se extiende hasta el 30 de noviembre de 2026. A partir de ahí, se contempla la posibilidad de ejecutar dos prórrogas de 12 meses cada, lo que plantea una continuidad hasta 2028.
FCC, a través de su filial Servicios del Levante, se trata de la actual concesionaria del contrato. En 2021 renovó su relación contractual después de una completa licitación, que sufrió una ralentización de año y medio a consecuencia de los recursos especiales ante el Tribunal Administrativo Central (TAC).
Clece participa en el concurso público con su división Lafuente Servicios Integrales, cuya sede central se localiza en Paterna, aunque posee una delegación en la capital de la Plana. Con 719 empleados, presentó un balance en ventas de 48,2 millones de euros en 2023.
El contrato de limpieza de edificios y dependencias municipales tiene un presupuesto anual de 1,8 millones de euros. Esa cuantía se distribuye entre los medios materiales y humanos (1,3 millones), gastos generales (unos 170.000 euros), beneficio industrial (algo más de 78.000 euros) y los impuestos (alrededor de 325.000 euros).
Los trabajos que fija el pliego se estructuran en función de la periodicidad y complejidad. Por un lado, están los ordinarios, a su vez, se dividen en rutinarios, generales y específicos. Por otro, figuran los extraordinarios. En esta ultima clasificación, destacan aquellos que se realizan tras la ejecución de obras.
En cuanto a la recogida de residuos, el contratista se compromete a implementar las medidas necesarias para facilitar la segregación de desechos en cada una de las plantas de los edificios sujetos al contrato. Esto significa que se debe proveer a los centros de trabajo de papeleras y contenedores de pequeña capacidad, asegurando que los usuarios puedan separar adecuadamente la basura generada.
En el amplio listado de inmuebles y dependencias, aparecen desde la Casa Consistorial, pasando por El Fadrí o Tetuán XIV, hasta la Basílica de Lledó. En el contrato se hace una mención concreta a la limpieza de varias construcciones que el Ayuntamiento de Castelló considera esenciales, como son el Palau de la Festa, el Parque de Bomberos y las ermitas. Para cada un de ellas precisa qué tipo de higienización se debe llevar a cabo.