El megaparque eólico del Clúster Maestrazgo encara las obras: afectará a 2.600 parcelas

CASTELLÓ. Nuevo paso administrativo en el trámite para la construcción del megaparque eólico que proyecta la compañía Forestalia en varias localidades turolenses que limitan con la provincia de Castellón y que incluye una línea de muy alta tensión (MAT) hasta la subestación eléctrica de Morella, atravesando su término municipal, así como los de Portell de Morella y Cinctorres. La infraestructura está cada vez más cerca de hacerse realidad tras publicarse varias modificaciones que sufrirá el proyecto y, algo a tener en cuenta, la solicitud de la declaración de utilidad pública de la iniciativa, que abre la puerta a posibles expropiaciones en un futuro.

Este miércoles, el Boletín Oficial del Estado (BOE) sacó a exposición públicas los cambios implementados por la compañía en el proyecto de megaparque, concretamente en lo referente a una veintena de plantas eólicas que suman un total de 125 aerogeneradores y 727 MW de potencia, así como la línea de evacuación de energía desde uno de los parques hasta la subestación eléctrica de Morella. Proyectos para los que la empresa ha solicitado la declaración de utilidad pública.

De acabar otorgando el Ministerio de Transición Ecológica esta declaración, permitirá a la compañía, si lo requiere, la expropiación de los terrenos necesarios para llevar a cabo la iniciativa, especialmente en aquellos casos en los que no se llegue a un acuerdo con los propietarios. En este sentido, lo expuesto deja negro sobre blanco una nómina de parcelas que podrían ser objeto de expropiación y que, junto a muchas otras afectadas por servidumbres de paso u ocupaciones temporales, suman en total más de 2.600 parcelas, teniendo en cuenta la veintena de parques eólicos y la línea de evacuación.

250 parcelas de Castellón

Así, el listado de terrenos afectados de un modo u otro por la ambiciosa iniciativa en la provincia de Castellón ascendería a unos 250 parcelas, de las cuales 125 pertenecen al término municipal de Cinctorres, otros 30 al término municipal de Morella, y los restantes 95, a Portell de Morella. Por ahora, los municipios y vecinos afectados estudian el listado de parcelas afectadas tras la modificación del proyecto, pues aseguran no haber sido notificados ni informados por parte de la empresa, y tendrán 30 días hábiles para presentar las alegaciones que consideren oportunas.

La compañía, en este sentido, se limitó a informar de que "avanza la tramitación administrativa de los proyectos de energías renovables previstos" después de que el Ministerio de Transición Ecológica ya otorgara las declaraciones de impacto ambiental y la autorización administrativa previa. Según la firma, ha incorporado en el proyecto "todas las modificaciones que dictan las declaraciones ambientales" y ahora sólo queda la autorización administrativa de construcción, uno de los últimos trámites para poder iniciarse las actuaciones de instalación y construcción.

Soterramiento final

Hay que recordar que ya se anunció que la compañía modificaría el trazado de la línea eléctrica de muy alta tensión (MAT) con la que conectará estos parques a la subestación de Morella. Así, en la exposición al público de este miércoles se recoge, en lo referente a la MAT, la "adaptación del trazado" en diferentes tramos y algo a tener en cuenta: el soterramiento del trazado en su último tramo hasta la subestación eléctrica. Algo que daría respuesta a las quejas de las masías que dan nombre a la subestación y a la zona por la cercanía de la línea a estas edificaciones.

Antes del visto bueno a la declaración de impacto ambiental, la compañía ya presionó a los vecinos de las poblaciones afectadas el contrato para que permitieran la instalación de las torres y el paso de la línea de evacuación, si bien entonces no recogía el soterramiento como había prometido. Ahora, en la exposición al pública del modificado, ya se incluye. Pero sin embargo, sigue recibiendo el rechazo de los municipios.

Sin ir más lejos, el Ayuntamiento de Morella emitió este miércoles un comunicado rechazando la iniciativa al transcurrir la línea a través de "diferentes terrenos de explotaciones agropecuarias y viviendas, así como puede influir en los acuíferos de ésta zona" con el soterramiento. El alcalde, Rhamsés Ripollés, reiteró que el proyecto "no tiene en cuenta las viviendas y las explotaciones, parajes naturales y zonas protegidas que hay en su trazado" y reiteró su oposición a la declaración de utilidad pública. 

El edil dijo haber solicitado a la firma las modificaciones planteadas con detalle, "ya que no disponemos de ellas", aclaró para añadir que apoya "a las familias y explotaciones afectadas por esta línea de muy alta tensión que atraviesa nuestro territorio". "Cuando tengamos toda la información, ya que por falta de transparencia de la empresa no lo hemos podido conocer, acordaremos las acciones a emprender junto a las personas afectadas", recalcó.

Gratuidad en el consumo eléctrico

La compañía propuso a los ayuntamientos de las tres localidades por las que pasará la línea de muy alta tensión hasta la subestación de Morella, los tres situados en la comarca de Els Ports. la firma de un convenio para que los hogares con empadronados en sus localidades puedan acceder a la gratuidad en su consumo eléctrico. Algo que rechazaron los ayuntamientos de manera inmediata.

Por ahora, Forestalia ya lo hará en cuarenta municipios aragoneses, repartidos en siete comarcas de las provincias de Teruel y Zaragoza. Cuando entren en funcionamiento proyectos propiedad de Forestalia de energías renovables en esos territorios, los domicilios con vecinos empadronados en los municipios que voluntariamente se han adherido al acuerdo serán bonificados con una cantidad equivalente al consumo. La efectividad se extenderá durante toda la vida útil de las plantas que suministren la energía renovable, estimada en 30 años.

"Mediante estos acuerdos, se incide en el interés por que la población local sea beneficiada por las instalaciones de energías renovables, con un consumo de energía limpia que contribuya, además, a la neutralidad climática de los municipios", explica la firma en un comunicado, donde destaca que además de facilitar el consumo doméstico con carácter gratuito a los vecinos empadronados, también supondrá unos ingresos adicionales de libre disposición municipal, destinado a usos de fomento socioeconómico, creación de empleo y fijación de población en estos ámbitos.

Se estima que la inversión será de más de 800 millones de euros, con una generación de empleo de 1.300 puestos de trabajo directos en las fases de construcción y de explotación de las plantas eólicas y fotovoltaicas.