CASTELLÓ. Golf Sant Gregori ya tiene prácticamente vía libre para comenzar a echar a andar sobre el terreno. Y es que la empresa promotora acaba de adjudicar los primeros trabajos, los de demolición de las viviendas existentes en la zona. Lo ha hecho a Áridos Mijares por un montante de 38.236 euros (con una baja del 3%), que serán abonados por todos los propietarios de forma alicuota. La firma de Onda se ha hecho con el contrato, después de imponerse en un concurso restringido en el que han participado otras dos empresas.
Para comenzar a ejecutar estas labores de derribo, que también comprenderán la delimitación del Plan de Actuación Integrada (PAI) en sus límites norte y oeste y que se desarrollarán durante dos meses, tan solo resta un trámite: la firma del acta de replanteo entre el Ayuntamiento de Burriana y la empresa promotora.
Y esto se podría producir en breve. No en vano, la sociedad impulsora del PAI ya ha materializado también los otros tres contratos que eran necesarios para proceder a la firma del acta de replanteo: la contratación de la dirección y seguridad de las obras de urbanización y la de la asistencia técnica para el consistorio de la Plana Baixa. Así, solo resta que el Ayuntamiento cite a la promotora para proceder a este último paso.
De esta manera, Urbanizadora Golf Sant Gregori SA ya ha definido el equipo técnico que se encargará de la dirección de las obras de urbanización, para las que se prevé un plazo de ejecución de tres años y una inversión de alrededor de 85 millones de euros. Este contrato ha sido adjudicado a la ingeniería valenciana Intercontrol Levante y su director técnico, Pascual Abad, será así el director de la obra.
Junto a él, otros cuatro técnicos de la compañía trabajarán de forma permanente en el proyecto hasta la conclusión de las labores de urbanización. Y esta dotación se verá reforzada con el personal que sea necesario en cada momento de los trabajos de urbanización, que se solaparán con las primeras promociones de edificios.
Junto a este contrato, en los últimos días también ha sido adjudicada la coordinación de la seguridad de la obra de urbanización al arquitecto técnico de Castellón Ernesto Fabregat y la asistencia técnica al Ayuntamiento de Burriana al ingeniero civil de la localidad Manuel Melchor.
De esta manera, en las próximas semanas podrían comenzar las primeras obras en el PAI, con algo de retraso, eso sí, a las previsiones que manejaba la compañía. Debido al diferente estado que presentan las edificaciones de la zona, desde la urbanizadora incluso se ha incluido en el acta de replanteo un procedimiento para que la Policía Local de Burriana acompañe a los trabajadores al lugar de trabajo.
Y es que, además de propietarios que apuran sus últimas semanas en las alquerías y casas de campo que mantienen en la zona, también hay viviendas semiderruidas y en malas condiciones. Ante la posibilidad de que en algunas de estas puedan haber inquilinos irregulares, la promotora ha querido evitarse posibles problemas.
