CASTELLÓ (EP). El líder de la secta destructiva que se instaló en una masía de la localidad castellonense de Vistabella del Maestrat ha sido hallado muerto en la cárcel Castellón I, donde permanecía desde que la titular del Juzgado de Instrucción 6 de Castellón acordase el pasado mes de marzo su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza.
Según ha podido saber Europa Press, el hallazgo se produjo en la mañana de este domingo, durante el recuento de los presos. La muerte se estima que puede ser natural, por las patologías previas que tenía el hombre.
Además del líder de la secta, la jueza decidió el ingreso en prisión de otros dos detenidos, mientras que otros seis arrestados quedaron en libertad provisional con medidas cautelares de alejamiento y prohibición de comunicación respecto a las víctimas.
La causa, que está declarada secreta, está abierta, entre otros, por delitos de agresión y abuso sexual, tanto contra adultos como contra menores de edad, trata de seres humanos con fines de dominación doméstica y sexual y exhibición de pornografía a menores, sin perjuicio de ulterior calificación.
La Generalitat Valenciana asumió la tutela de dos personas menores de edad liberadas de la secta destructiva instalada en la masía.
Crusing, intercambio de parejas, meditación y examinar el propio ano con un espejo, esos eran los principios raelianos de amor y sabiduría, que se extendieron en la Francia de los 70 y 80. La secta, sin embargo, fue famosa por intentar clonar seres humanos para alcanzar la inmortalidad. Un documental explica la figura de su líder, Marcel Vorilhon (Raël) que aseguraba haber sido abducido por unos alienígenas, los elohim, entre quienes se encontraban Cristo, Mahoma, Buda y Moisés
Veterano de la Segunda Guerra Mundial, experto en judo, atracador de bancos, presidiario y propietario de un restaurante vegetariano que triunfó entre las celebrities de Hollywood. Esa era la peripecia de Jim Baker hasta que a sus cuarenta y pico años, probó el LSD y decidió dar un cambio a su vida. Se hizo gurú de meditación y le fue igual de bien que con el restaurante, así que montó una comuna y se dedicó a difundir la "magia sexual" entre las chicas de 17 años que se unieron, mientras hacía rock psicodélico y conducía un Rolls