VALÈNCIA. 'No hay techo para las cajas rurales valencianas: ganan casi un 30% más hasta septiembre'. Así titulaba este diario el pasado 13 de diciembre... y sigue sin haberlo porque el beneficio conjunto durante todo 2022 se disparó hasta los 51,47 millones de euros. O lo que es lo mismo: un 26,77% más que un año antes o una mejora de 10,87 millones en términos absolutos, tal y como lo recogen los números individuales de la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (Unacc).
El incremento porcentual del conjunto total fue idéntico al que presentaron a lo largo de 2021, pero en esta ocasión (2022) fueron nueve las que ganaron más de un millón de euros frente a las ocho de hace un año. Todas ellas del Grupo Caja Rural -el de la espiga-, es decir, el formado por Banco Cooperativo Español, Asociación Española de Cajas Rurales (AECR), Rural Servicios Informáticos y Seguros RGA.
Proximidad y cercanía siguen haciendo de imán en las cooperativas de crédito, que en el caso de las 30 que operan en el terreno autonómico solo una -Ruralnostra de Betxí-redujo su beneficio anual. Concretamente un 20,78% hasta los 980.168 euros, siempre según los datos de la patronal presidida por Manuel Ruiz, que ocupa idéntico cargo en la Caja Rural Central de Orihuela. Y hablamos de 17 del Grupo Cajamar, 13 del Grupo Caja Rural y 2 del Grupo Solventia.
Unas cajas rurales -y no solo las de la Comunitat Valenciana- que se mantienen al margen del proceso de desapalancamiento por el que sigue atravesando la banca española. El mismo que sigue aligerando las redes comerciales, cerrando sucursales y despidiendo/prejubilando a no pocos empleados. No en vano, y en lo que a estos pagos se refiere, el sector bancario ha perdido dos tercios de su red desde la crisis de 2008. Casi nada.
Tal y como suele ser habitual, las 13 entidades del Grupo Caja Rural presentaron un mayor beneficio con 45,73 millones, es decir, un 26,06% más en términos porcentuales; mientras que en números absolutos fue de 9,45 millones. Ni que decir tiene que Caixa Popular y Caja Rural Central de Orihuela volvieron a llevar la voz cantante, con un 73,20% del total, y además librando su particular 'batalla' por ser la mayor cooperativa de crédito en la Comunitat Valenciana. Así, la primera presentó un beneficio individual anual de 16,83 millones (+27,09%); mientras que la segunda de 16,64 millones (+42,03%).
En términos porcentuales las tres mayores subidas dentro del grupo de la espiga correspondieron a las rurales de Cuevas de Vinromá (+82,13%), Albal (+48,92%) y Vinaròs (+47,12%); mientras que junto a Caixa Popular y Rural Central de Orihuela superaron el millón de euros de beneficio Algemesí (1,02 millones), Benicarló (1,33 millones), Vinaròs (1,32 millones), Alcora (1,68 millones), Onda (2,12 millones), L'Alcudia (2,17 millones) y Almassora (2,33 millones).
Por su parte, las 17 entidades que integran el mayor grupo cooperativista español como es el de Cajamar impulsaron el beneficio conjunto un 42,24% hasta los 4,07 millones de euros. O lo que es lo mismo: 1,21 millones más. En números absolutos sobresalieron Torrent (+218.349 euros), Altea (+128.130 euros) y Católico Agraria de Vila-real (+127.906 euros); mientras que en términos porcentuales lo hicieron Nules (+78,41%), Vilavella (+51,25%) y San Vicente Ferrer de la Vall d'Uixó (+48,38%).
Por último, las dos cajas rurales de la Comunitat que forman parte del Grupo Cooperativo Solventia -liderado por la extremeña de Almendralejo- presentaron también números ascendentes. Así, Benicarló ganó un 8,87% más hasta cerrar 2022 con un beneficio de 1,33 millones de euros; mientras que L'Vall San Isidro impulsó el suyo un 42,22% hasta los 325.935 euros.