CASTELLÓ. La austriaca Kapsch TrafficCom elaborará el estudio de movilidad para implantar la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) en Castelló. La multinacional, presente en más de 50 países y que facturó 520 millones en el último ejercicio, se ha impuesto a la otra finalista de la licitación, la Unión Temporal de Empresas (UTE) compuesta por Etra y la castellonense Telecso. Lo ha hecho al obtener la mejor puntuación tanto en la fase de evaluación de los criterios técnicos como en la de la baremación de la plica con los aspectos económicos.
Las mejoras más significativas que ofrece la compañía contemplan una rebaja del 12,5% respecto al presupuesto estimado y una ampliación del plazo de garantía. En el primer caso, se trata de una reducción de 252.000 euros en el precio del contrato, que pasa de los 2.016.000 euros al 1.764.000 euros. En el segundo, el incremento alcanza los siete años frente al mínimo de tres exigido en el pliego de contratación.
El estudio de movilidad resulta esencial para la peatonalización de la denominada Modal 1. Al margen de ofrecer un diagnóstico sobre el flujo de circulación, determina las necesidades de estacionamiento (aparcamientos disuasorios) y define los nuevos puntos para instalar videocámaras. Asimismo, establece las ubicaciones de las estaciones de medición de cara a controlar la contaminación acústica y la calidad del aire.
El contrato tiene un plazo de ejecución de 16 meses y, como ocurre con la ZBE, está cofinanciado con Fondos Europeos Next Generation en el marco del Plan de recuperación, transformación y resiliencia. Esto significa cumplir escrupulosamente unos plazos marcados por Bruselas.
No en vano, las bases están redactadas de acuerdo con esos plazos. En diciembre, la concesionaria deberá entregar el documento con el análisis y el diagnóstico previo a la Zona de Bajas Emisiones. Ya en 2023, en junio, el siguiente informe corresponderá a la planificación y evaluación de escenarios, así como al diseño de la supermanzana. A partir de esa propuesta, se procederá a instalar los distintos sistemas, una fase prevista en octubre. Estos dispositivos son los de reconocimiento de matrículas; los de vigilancia, producción, medición e información de la calidad del aire; y los de medición del nivel sonoro.
En diciembre del próximo año, la adjudicataria tendrá que aportar las memorias sobre la mentada plataforma de gestión de la monitorización, caracterización del parque circulante y de control de infracciones y el software y aplicación móvil para la autorización, información y consulta de usuarios. Por último, en febrero de 2024 redactará la propuesta acerca de los emplazamientos de los paneles informativos.
No es la primera vez que Kapsch TrafficCom trabaja con el Ayuntamiento de Castelló. Sin ir más lejos, es la empresa responsable de la instalación de las videocámaras en el centro. En 2019, se hizo con el contrato para crear un sistema inteligente de transporte público a fin de gestionar de una manera más eficiente la movilidad en la ciudad. El proyecto, cifrado en cinco millones de euros, incluyó una aplicación móvil para informar en tiempo real al ciudadano sobre sanciones, horarios o trayectos permitidos, entre otras opciones. Asimismo, implicó la sustitución de bolardos que cierran al tráfico las calles peatonales en el casco histórico por sistemas de reconocimiento de matrícula.