el consell retoma el cierre de la planta

La EDAR Vora Riu perfila su derribo y Vila-real busca ya depurar aguas para 95.000 habitantes

26/10/2018 - 

VILA-REAL. La reactivación del sector de la construcción y el irreversible deterioro de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) Vora Riu, que apenas funciona al 54% de su capacidad, han llevado a la Generalitat a rescatar el proyecto de construcción de una canalización de cuatro kilómetros de longitud hasta la depuradora de Almassora. La ejecución de ese proyecto, que data del año 2008 pero fue arrinconado por el fin de la burbuja inmobiliaria, permitiría clausurar Vora Riu y garantizaría la depuración de aguas fecales de Vila-real en un umbral máximo de población de 95.000 habitantes.

La Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar), dependiente de la Conselleria de Agricultura, ha actualizado el proyecto constructivo y el estudio de Integración paisajística de la nueva canalización y acaba de abrir un período de alegaciones.

En la actualidad, Vila-real vierte sus aguas fecales a la EDAR de Vora Riu y a la mancomunada, que también presta servicio a Onda, Betxí y Les Alqueries. La primera, que tiene casi medio siglo de antigüedad, funciona a medio gas ya que tan solo depura 5.494 metros cúbicos diarios; la mancomunada, que está operativa desde 1997, solo trata 10.275 metros cúbicos diarios pero está diseñada para un máximo de 22.486 metros cúbicos diarios.

El proyecto, estimado en 2,8 millones de euros, pretende trazar la conexión subterránea desde Vora Riu a la EDAR de Almassora para derivar una parte de las aguas ahí y otra parte a la EDAR mancomunada (ya conectada). El último paso sería clausurar la depuradora de Vora Riu y derribarla.

No solo la obsolescencia de Vora Riu motiva la creación de la gran tubería de cuatro kilómetros: la paulatina revitalización del sector de la construcción también es un incentivo. Según el proyecto constructivo, el concierto previo del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Vila-real esboza una futura ciudad que, con todo el nuevo suelo urbanizable residencial desarrollado, alcanzaría los 95.000 habitantes. Y, en ese contexto, la EDAR mancomunada y la de Almassora tendrían capacidad para depurar los 19.108 metros cúbicos diarios de aguas fecales requeridos.

Según el citado documento, solo con el desarrollo urbanístico residencial de Solaes (entre las vías del tren y la N-340), Bassa d’Insa y cuatro sectores más, Vila-real alcanzaría la barrera de los 80.000 habitantes y la necesidad de depuración de aguas sería de 16.162 metros cúbicos diarios.

El proyecto de la canalización inicia ahora la tramitación tras permanecer bloqueado una década mientras el nuevo PGOU de Vila-real sigue sin ver la luz nueve años después de que el consistorio aprobara el concierto previo.


Noticias relacionadas

next