Los 650 asociados de Cítrics de Nules ya tienen vía libre para vender su naranja

CASTELLÓ. Empiezan a resolverse algunas incógnitas que se mantenían en el aire en el proceso de liquidación de la cooperativa Cítrics de Nules anunciada en agosto. Con la solicitud del concurso de acreedores, presentada a finales del mes pasado, se iniciaba el tránsito para la desaparición de la compañía, que ya adelantó que no abriría las instalaciones para la próxima campaña y uno de los interrogantes que se abría versaba sobre la operativa de los cientos de asociados de la cooperativa para vender su producto.

En ese sentido, los socios de la cooperativa de la Plana Baixa estaban a la espera de noticias de la firma para saber si podrían comercializar su fruta por otras vías. La carta de libertad era indispensable para buscar salida a la producción de la próxima campaña. Y finalmente, los alrededor de 650 socios de la cooperativa ya han sido notificados en ese sentido.

Así, según informan algunos asociados, Cítrics de Nules les ha dado vía libre para que puedan dar salida a su naranja en la próxima campaña. "Al no tener medios suficientes para iniciar la campaña y recoger la naranja, la cooperativa ha dado luz verde", explican en ese sentido las fuentes consultadas.

Dentro de la delicada situación generada por el anuncio del cierre de la cooperativa, esta noticia ha sido bien acogida por los agricultores que, ante la liquidación, ya tienen algo más de claridad sobre el futuro a corto plazo. Ahora, el objetivo de los socios es encontrar la mejor salida para su producción. Y para eso, ya han llegado algunas ofertas.

Sin ir más lejos, otra cooperativa frutícola de la comarca, Vallfrut, de la Vall d'Uixó, ya ha ofrecido a los agricultores hasta ahora asociados a Cítrics de Nules la posibilidad de integrarse en su nómina de socios. En este caso, como socios temporales, para que pudieran vender sus cosechas pero sin la obligación de inyectar capital en la cooperativa.

Un ERE en negociación

Por otro lado, el cierre de Cítrics de Nules supondrá la pérdida del empleo para 1.043 personas, que estarán afectadas por un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) para la totalidad de la plantilla. Cítrics de Nules comunicó oficialmente el 28 de agosto la imposibilidad de iniciar la campaña por la falta de financiación bancaria, que ponía en peligro el pago de los salarios y a los proveedores, y se abrió el periodo de consultas del ERE durante un mes.

Al tratarse de una causa objetiva, la ley prevé el mínimo de indemnizaciones, de 20 días al año con un tope de 12 mensualidades que deberá abonar el Fogasa. Si bien las condiciones finales de las indemnizaciones están en fase de negociación. Tras la aprobación del concurso por parte del juzgado de lo Mercantil número 1 de Castelló, el administrador concursal se encarga de esta tramitación laboral.

Con todo, el cierre de la cooperativa va más allá de sus paredes: no sólo es una cuestión laboral para sus trabajadores sino también un problema social en Nules y los municipios colindantes, para los que la noticia es un duro golpe económico y social debido a la pérdida de centenares de puestos de trabajos clave para la población. Por eso se está hablando con el Ayuntamiento, el SEPE y la Generalitat para intentar la recolocación de los empleados y otras vías como la formación. El colectivo de manipulado está conformado en un 95% por mujeres (encajadoras, triadoras o rajadoras) y el colectivo de recolección de naranja corresponde a hombres en ese mismo porcentaje.