CASTELLÓ (EP). Interrelacionar las diversas secciones del Ministerio Fiscal, conseguir la conciliación entre los compañeros, así como una buena organización e implicación son los retos que se ha marcado la nueva fiscala jefa de Castellón, María Díaz Berbel.
Así se ha manifestado este miércoles ante los medios María Díaz después de que este martes fuera propuesta como nueva fiscal jefa de Castellón -y contar con el apoyo de 11 de los 12 miembros del Consejo Fiscal-, en sustitución de José Luis Cuesta, el cual dimitió tras conocerse que había recibido la vacuna contra la Covid-19 antes de que fuera su turno.
María Díaz Berbel ingresó en la carrera fiscal en 1990 y desde 1994 ha estado destinada en dicha Fiscalía, lo que le otorga un "profundo" conocimiento de su realidad, según ha informado la Fiscalía General del Estado (FGE). Ha sido fiscala delegada de Cooperación Internacional (2005), de lo Contencioso-administrativo (2007) y de la sección Civil y Discapacidades (2008).
Destaca su currículum y su plan de actuación, con una "firme voluntad" de fomentar la modernización de la Fiscalía y de potenciar la transparencia y la especialización como elemento enriquecedor del servicio público, con especial atención a las víctimas y a las personas vulnerables, añade la FGE.
La nueva fiscala jefa ha subrayado que uno de los ejes de su proyecto es la transvesalidad, "puesto que el Ministerio Fiscal abarca muchas materias que requieren de gran especialización y las secciones, muchas veces, es difícil interrelacionarlas", según ha dicho.
Así, María Díaz pretender dotar a dichas secciones de transversalidad, es decir que las especialidades vuelvan a mezclarse, de tal manera que -ha puesto un ejemplo- una persona discapacitada que cometa un delito "sea tratada no solo por la sección penal que conoce del delito, sino también por la sección de discapacidad, que puede, a su vez, imbuir de la necesaria protección a esa persona que necesita de apoyos y que está cometiendo delitos porque no los tiene, ya que muchas veces no podemos interrelacionar estas secciones".
Además, María Díaz apuesta por la conciliación entre compañeros, una buena organización y la implicación en la labor. "Cuento con unos compañeros maravillos y gente super formada, me siento tranquila, y pienso dirigir esta orquesta si me dejan", ha apuntado.
Por otra parte, la nueva fiscala jefa ha señalado que pedirá la ampliación de la plantilla de fiscales y de funcionarios de la provincia, puesto que -según ha dicho- actualmente hay 30 fiscales y "los jueces casi triplican esta cantidad".
"Lo que es obvio es que el Ministerio Fiscal tiene una intervención mayúscula en muchas materias, y eso hace que tengamos que tener muchos conocimientos e intervención, y esa intervención en muchas ocasiones se tiene que excusar porque carecemos de medios para atenderala y, en otras ocasiones, se acude pero a lo mejor no con los medios necesarios porque no podemos abarcarla", ha subrayado María Díaz.
Al respecto, ha destacado el apoyo que necesita la sección de la Fiscalía en Vinaròs, "pues por la provincia pasa mucha delincuencia tranacional y Vinaròs es un punto neurálgico de criminalidad. Es una sección con muchísmo trabajo y necesita también apoyo", ha indicado.
María Díaz, así mismo, ha señalado que propondrá continuar siendo delegada de discapacidad, y ha añadido que otro de sus objetivos es separar las secciones civil y de discapacidad en la provincia.
Preguntada por los desencuentros que se han producido en la etapa anterior entre la Fiscalía y los jueces, la nueva fiscal jefa ha manifestado que cree que lo que hubo anteriormente es "agua pasada", y ha añadido que "el problema fue puntual", por lo que espera que ya no exista.