Hoy es 15 de noviembre

La pandemia le sienta bien a Industrias Dolz: cerrará el año con un récord "histórico" en ventas

13/12/2021 - 

CASTELLÓ. A pesar de dedicarse a la industria del automóvil, Industrias Dolz ha esquivado a las mil maravillas las dificultades que actualmente atraviesa este sector económico en todo el mundo, acuciado por la falta de componentes y la dependencia del mercado chino. De hecho, la compañía castellonense cerrará el año "batiendo récords históricos" de facturación, señala su director general, Jesús Dolz.

El motivo es que la firma radicada en Almassora se dedica a la fabricación de piezas (fundamentalmente bombas de agua, pero también otras, como kits de correa o de cadena) vinculadas con el mantenimiento y la reparación, y esta rama se está viendo favorecida por la pandemia y la situación actual del sector de vehículos nuevos, en el que el bajo ritmo de fabricación hace que haya poca oferta. 

Un 25% por encima de los 53 millones de récord 

"La desaceleración en la venta de nuevos vehículos esta potenciando el mercado de segunda mano y la reparación. Esto no es un problema ni muchísimo menos para nosotros", reconoce Dolz. Gracias a ello, este año "nuestras cifras dejan muy atrás las de la covid en 2020", que superan "en un 40%", asegura el director general, pero también las precovid, que rebasará "en un 25%". No es un mal crecimiento para una compañía cuyas cuentas consolidadas fueron el año pasado de 46 millones de euros y alcanzó su mayor facturación en 2017 con 53 millones. 

"La falta de componentes (microchips), que está afectando a la industria del automóvil, no nos perjudica, salvo en algunas aplicaciones muy concretas. El sector mas relacionado con el mantenimiento y la reparación de vehículos, que es en el que nos encuadramos, funciona en parte al margen, y se recupera de la pandemia y sus efectos a un ritmo muy diferente", reitera a este respecto Dolz. 

Otra cosa diferente son los incrementos de los costes que están sufriendo todos los sectores industriales: "El gran aumento del precio del transporte o del aluminio nos afecta mucho más que el de la energía", señala el director general. Así, aunque el alza del gas repercute en su planta de fundición de aluminio y la de la electricidad en la maquinaria de mecanizado y montaje, son más preocupantes los incrementos de los primeros. 

Repercutir los costes

Por eso, como prácticamente todo el resto de las factorías, Industrias Dolz se ha visto obligada a repercutir estas alzas en los precios del producto acabado. "Nuestro primer objetivo es ser capaces de repercutir estos aumentos a nuestros clientes, que en general priorizan la disponibilidad de materiales y aceptan nuestros aumentos". El contexto también tiende a ello, y lo favorece, por esta razón Jesús Dolz reconoce que, "quien no sea capaz de aumentar ahora sus precios, no lo será nunca". 

En cuanto a la dependencia del mercado chino, y a pesar de que cuenta con una fábrica en el gigante asiático (y otra en Argentina), el mayor volumen de fabricación de Industrias Dolz se sigue produciendo en Almassora. En este sentido, y tras unos años de dificultades, "ahora nos congratulamos de la estrategia local que en su momento decidimos adoptar", remarca su director general. 

Crecimiento sostenido

De cara al futuro, los planes son crecer de forma moderada: "Nuestro plan de negocio a medio plazo es conservador y positivo. Esperamos mantener unas cifras de crecimiento que se prevén estables en nuestro plan de negocio de los próximos 10 años... y en adelante", remarca Jesús Dolz. Para ello, hay dos piezas claves: incidir en la diversificación de la cartera de productos, "algo ya en marcha"... y México. 


Desde la filial mexicana, que la firma castellonense abrió a principios de 2019, el objetivo es abrir "nuevos mercados donde todavía no gozamos de presencia". Se trata así de incidir en el continente americano. Otra vía de expansión debe llegar desde China, "que debe seguir creciendo en el mercado local, donde ya tenemos una presencia reconocida", señala el director general. Con ello, la firma nacida hace casi 90 años en Castelló y que desde 2014 controla el fondo Realza Capital tras hacerse con el 90%, busca encontrar nuevas vías para seguir creciendo.

Noticias relacionadas

next