CASTELLÓ. La Universitat Jaume I de Castelló ha recuperado gran parte de sus actividades presenciales con el establecimiento de diversas medidas que garantizan la seguridad sanitaria de las personas que acuden al campus, como la señalización de los espacios en aulas e itinerarios de desplazamiento o la mejora de la infraestructura en nuevas tecnologías que ha permitido adaptarse a la docencia semipresencial. Otra de las medidas preventivas que se ha adoptado ha sido la instalación de 30 sensores de control de temperatura corporal que pueden ayudar a detectar posibles positivos.
Más de 13.000 estudiantes llenan ya las aulas de la UJI, y para contribuir a evitar contagios entre la comunidad universitaria, la institución educativa ha tomado una serie de medidas preventivas entre las que destaca la instalación de 30 sensores de control de temperatura corporal que ayudarán a detectar posibles positivos.
Esta solución, suministrada por IoTsens -empresa de Grupo Gimeno especializada en soluciones tecnológicas-, hace posible que el personal y el estudiantado mida a distancia, mediante un sensor de infrarrojos, su temperatura en los principales accesos a las facultades y las entradas de la biblioteca, el rectorado y las instalaciones deportivas. Un gesto clave teniendo en cuenta que la fiebre es uno de los síntomas más comunes de la covid-19.
De esta manera, serán capaces de conocer su temperatura en tiempo real, gracias a un display OLED que muestra los resultados de forma numérica e indica visual y acústicamente si la temperatura detectada está en los rangos aceptados para acceder al edificio o recinto.
En concreto, el sensor -capaz de medir la temperatura de una persona en tan solo 3,5 segundos- dispone de distintos códigos de sonido y leds de colores que se activan según el estado: parpadeo para indicar que el dispositivo está midiendo, rojo para alertar de que la persona está fuera del umbral definido y verde para señalar que el valor está dentro de los parámetros correctos.
Y para asegurar un servicio completamente adaptado a las necesidades de la institución educativa, IoTsens ha personalizado el rango de funcionamiento del sensor, así como las acciones de la salida digital y el encendido y apagado de forma remota y customizado con su imagen corporativa.
De esta manera, la universitat pública de Castelló se une a otras empresas y entidades que ya cuentan con este innovador sensor de control de temperatura corporal en sus instalaciones, como son Porcelanosa, Valencia Plaza, Aquarama, Sacmi, Refrival, Nayar Systems y Tecinsa o la escoleta de l’Ajuntament del Real y el Conservatori Profesional de Música Francesc Peñarroja de la Vall d’Uixó.