La pareja imposible

El presidente y el líder de la oposición. A estas alturas de la película o de la política debería ser algo normalizado que ambos se reunieran habitualmente, aunque solo sea para hablar de los asuntos que preocupan a los españoles. En este momento hay unos cuantas cuestiones a resolver. En esa agenda tenemos una reforma constitucional con variados asuntos, entre ellos una supuesta corrección o adenda del título VIII sobre las autonomías, la eterna discusión sobre la financiación autonómica, condonación de la deuda provocada por los acuerdos con independentistas catalanes y no parece que por las urgencias de cada comunidad, y no digamos la renovación del Consejo General del Poder Judicial. Por no decir la situación económica y social y la posibilidad de establecer pactos de Estado, aunque parezca inaudito. Son citas imposibles y una pareja que no casa. Da la sensación que cualquier encuentro que vayan a tener será solo una foto de cara a la galería porque no habrá entendimiento. La última novedad es la propuesta de comisiones negociadores, vamos como con ERC y Junts, ya solo faltaría un mediador entre Sánchez y Feijóo, en fin que el PP ya ha dicho que no pasa por las comisiones. Deberían esforzarse, el uno desde el poder y el otro desde la oposición. Y ambos dos deberían ceder, poco o mucho para llegar a acuerdos. Es incomprensible 

Constitución manipulada o manipulable. La Carta Magna que nos gobierna desde 1978 y que fue refrendada por la mayoría de los españoles y curiosamente en Cataluña la comunidad donde más se apoyó, es fuente de disputa y discusión. La manosean unos y otros. Se le echa la culpa de todos los males, que si hay que reformarla,-en algunas cosas necesarias como la prevalencia del varón sobre la mujer en la Corona y Jefatura del Estado, o en la utilización del término “disminuido”-, o que hay que hacer una nueva. Se busca una nueva redefinición del Estado, apostando por la plurinacionalidad como quieren los independentistas y nacionalistas, se quiere forzar para hacer caber en ella algo tan controvertido como la ley de amnistía que rechaza más del 60% de la población o forzar la celebración de referéndum para cumplir con el derecho a decidir que piden los socios de investidura ERC y Junts,... en fin que el texto se quiere estirar de tal manera que al final ni lo vamos a reconocer. 

Confusión de poderes. La Unión Europea ya no sabe como llamar la atención a España y al PSOE y PP para que renueven el Consejo General del Poder Judicial y además mantiene sus dudas sobre la aplicación del Estado de Derecho en nuestro país a cuenta de la Ley de Amnistía entre otras cosas. El buzón de correos de la UE está a rebosar de quejas de ciudadanos pidiendo ayuda y soluciones. No se fían de la actuación del Gobierno y la deriva de sus últimas decisiones. Por momentos el poder ejecutivo se funde con el judicial con los nombramientos, con la aplicación de las leyes, por la habitual y nefasta casuística de las “puertas giratorias” que ya se han convertido en un clásico de nuestra política. Vemos esos caminos de ida y vuelta de jueces que llegan a la política y que de nuevo vuelven a la carrera judicial. Se cambian las tipificaciones de los delitos, se minimiza la corrupción en los casos de malversación. Sale barato ser corrupto. Y no entremos ya en la sedición y los desórdenes públicos. Se desdibuja la línea de la separación de poderes con una perniciosa utilización por parte del Gobierno, lógicamente por interés propio. Lo hemos visto con los pactos matemáticos y estratégicos para seguir en el poder. 

El Tablero

PSOE: Pedro Sánchez en “Tierra firme”. O eso dice su nuevo libro, transcrito por Irene Lozano, de profesión escribiente de Sánchez. El nuevo panegírico recoge las andanzas del presidente desde el gobierno de coalición con Podemos/Pablo Iglesias ¡qué cosas! Hasta el 23 de julio “su renacer”. Hasta presenta el libro Jorge Javier Vázquez. Digamos que ahora Sánchez inasequible al desaliento se apresta a conservar esta legislatura aunque tenga que negociar con el sursum cordan, llámese independentistas, nacionalistas o Podemos, que ahora es lo que toca. Mientras en el PSOE nadie levanta la voz. Emiliano García-Page se ha quedado como un verso suelto y solo los históricos hablan claro. Tiene un gobierno pretoriano con Bolaños de súperministro y cuatro vicepresidentas a la espera de que Nadia Calviño se vaya al Banco Europeo de Inversiones. Con Yolanda Díaz de momento lidia con ella, aunque algunos se barruntan que a no mucho tardar la dirigente de Sumar puede ser subsumida. Mientras Sánchez sigue avanzando con Puigdemont, con mediador incluido en Suiza y pronto tendremos verificador para ERC, se acaba la presidencia de turno europea, y aunque ha habido algún que otro “tropiezo” diplomático con Israel, pelillos a la mar. Y luego está la política de nombramientos/controles. Por ejemplo enviamos a Miquel Iceta a la Unesco, o al breve ministro canario Héctor Gómez nada menos que a la ONU, sin ninguna experiencia diplomática y de paso recuperamos a su ex secretario de Estado, Miguel Ángel Oliver como presidente de EFE. Todavía habrá más novedades/sorpresas en el segundo escalón.

PP: Alberto Núñez Feijóo y su travesía del desierto.  Se supone que los nuevos cambios en la dirección popular deberán dar la batalla contra las políticas de Sánchez. Digamos que se ha hecho cirugía fina para que siguieran los mismos pero cambiados de ubicación. Algún que otro trasquilón ha habido. Elías Bendodo ha sido la víctima, rebajado de coordinador a vicesecretario. Dicen que había mucho jefe y poco indio. Ahora Feijóo se rodea de diez mujeres y 6 hombres en su comité de dirección. Con esta nueva nomenclatura se cambia de estrategia. Se deja la calle y se inicia el camino de oposición en el parlamento y en la justicia. Faena hay mucha. Tendremos ese próximo encuentro con Sánchez en el que hablarán del CGPJ y de la financiación autonómica, veremos si de algo más. Se intenta conjurar la separación total de Vox, no es socio ni oportuno, ni interesante. Mientras ha habido el correspondiente reparto de poder en las comisiones parlamentarias con la llegada de portavoces adjuntos sorpresivos como Cayetana Álvarez de Toledo o Rafa Hernando, o la entrada en el comité de dirección el incombustible Javier Arenas. ¿No quedamos en que Feijóo buscaba la centralidad? ¿O como dice Sánchez hay que hacer de la necesidad, virtud?

Vox: Santiago Abascal y la pataleta. Ya que estamos con las comisiones parlamentarias, Abascal se ha indignado. Dice que el PP pacta hasta con el diablo para tener esa cuota de poder en el Parlamento. El diablo claro es el PSOE y por añadidura Sumar. El líder de Vox dice que rompe con el PP a nivel nacional pero que se mantienen los pactos en autonomías y ayuntamientos. Es decir, que nadie se preocupe que no va a perder los puestos de trabajo en la gestión diaria de esos gobiernos. Vox tiene un problema o varios. En los sondeos, de los que nos podamos fiar que ya sabemos en los últimos tiempos lo poco acertados que han estado, dicen que están a la baja y siguen cayendo sin solución de continuidad, así que siguen con la sobreactuación buscando titulares. Viajes a Israel, presencia en las manifestaciones en Ferraz, declaraciones desabridas contra Feijóo,...en fin, mucha presencia mediática.

Sumar: Yolanda Díaz y sus aventuras inconclusas. Pablo Iglesias lo ha logrado. Está en el “candelabro” político. Ha roto con Yolanda Díaz su heredera y “amiga” y Podemos ya está liberado. La patata caliente es para Sánchez que ahora tendrá que negociar con ellos. Ione Belarra ya ha transmitido a Bolaños que no peligra la legislatura. Y Díaz, le guste o no queda en precario. Que sepamos, IU y Compromís ya le han pedido su cuota de pantalla. Incluso Iñigo Errejón también reclama su sitio. En sus andanzas galaicas ninguna de las aventuras que inicio cuajaron. Parece que tiene cierta habilidad para el fracaso, aunque en apariencia y formas parezca lo contrario. Muchos dicen que entre todos han dilapidado lo que tuvo de positivo el 15M y que incluso Sánchez puede tener problemas. La primera piedra de toque serán los Presupuestos Generales del Estado.

Las frases de la semana

Miquel Roca, padre de la Constitución: “La Constitución debe ser un terreno de coincidencia, no de disputa. No me entusiasma su reforma porque es el pretexto para otra pelea. Lo miro y lo sufro” ¡Retrato real de la cuestión. A muchos españoles les pasa lo mismo. No lo entienden!

Alberto Núñez Feijóo, presidente del PP: “Sánchez lidera un movimiento en contra de la Constitución” ¡Palabras gruesas. Será difícil entenderse con este diálogo de sordos!

Pedro Sánchez, presidente del Gobierno: “La mejor manera de defender la Constitución es cumpliéndola todos los días” ¡Lo dicho. Nadie da su brazo a torcer!

Francina Armengol, presidenta del Congreso: “El título VIII de la Constitución deja abierto el camino para avanzar en el proceso de acercar a los ciudadanos la toma de decisiones” ¡O sea que vamos a por el referéndum y el derecho a decidir. Vaya circunloquio!

Vicente Guilarte, presidente interino del CGPJ: “No puedo hacer más. Estar de juguete político no tiene mucho sentido” ¡Se avecina dimisión o algo así. Lo del Poder Judicial asunto sin resolver por falta de voluntad política de unos y otros!

Pablo Iglesias y su mismidad: “Me siento feliz y aliviado tras la ruptura, no sólo por el veto a Podemos en el gobierno, sino porque habían dejado al partido sin capacidad de influencia polítidca en el grupo parlamentario” ¡Pues para no mandar, no está mal. Todos tranquilos que es feliz y creo que los cinco parlamentarios podemitas ahora ganarán más emolumentos! 

Rafa Nadal vuelve a las pistas: “Espero no exigirme al máximo. Tengo que aceptar que las cosas van a ser muy difíciles al comienzo y perdonarme que las cosas vayan mal. Todo puede cambiar si mantengo la ilusión y el espíritu de trabajo y el físico me responde” ¡Como siempre dando ejemplo. En este caso gestionar el regreso para despedirse es su reto más importante!

Concha Velasco, la artista total: “Que sean ustedes muy felices y hasta siempre” ¡Así se despedía de su público en su última función en el Teatro Bretón de Logroño. Querida por todos, generosa, brillante, trabajadora, y libre como nadie. Y sobre todo madre de mi querido compañero Manu y de Paco. Tuve la oportunidad de entrevistarla en varias ocasiones, siempre divertida y locuaz, lo contaba todo con mucha gracia. Hasta siempre queridísima Concha!