Reunión del pasado mes de abril entre el director de Infraestructuras Educativas de la Consellería de Educación, Cultura y Deporte, Víctor García (c), con la concejala de Educación de La Vall d’Uixó, Carmen García (i).CASTELLÓ. Las obras de demolición del actual aulario y la posterior construcción de las nuevas instalaciones del colegio público Rosario Pérez de la Vall d’Uixó costarán alrededor de 4,5 millones de euros y culminarán en el año 2024. El Ayuntamiento ha licitado el contrato de redacción del proyecto constructivo y la dirección de obras por 297.338 euros y una duración de 32 meses.
Finalmente, la Generalitat ha optado por derribar y volver a alzar los tres edificios del colegio ubicado en el barrio Carbonaire. Todos presentan un evidente deterioro. El aulario de Infantil no puede ampliarse y, además, su red de saneamiento se emboza continuamente, los desagües tienen fugas, las humedades son múltiples, las persianas están en un pésimo estado, el cableado eléctrico está obsoleto, el alumbrado es antiguo, los inodoros están deteriorados y las grietas son evidentes en numerosos puntos de la fachada. Todos estos problemas se repiten en los otros dos edificios.
A falta de que los técnicos de la empresa que resulte adjudicataria definan el proyecto, la idea de la Conselleria de Educación es alzar el futuro edificio principal en el centro de la parcela y conectarlo a pie con los tres accesos desde la calle: el de Infantil, el de Primaria y el gimnasio. Fuentes municipales explican que el principal problema técnico que deberá resolverse es la gran inclinación de la parcela del colegio, de 8.836 metros cuadrados. De momento está por definir la ubicación de las pistas deportivas y de las zonas de juegos infantiles. Solo se sabe que el Ayuntamiento añadirá al colegio como espacio de juegos la parcela boscosa situada al norte, de titularidad municipal, que hoy carece de uso.
El reconstruido colegio Rosario Pérez contará con un aula de Infantil de primer ciclo, tres más de segundo ciclo y seis de Primaria, por lo que su capacidad máxima será de 245 alumnos.
El departamento autonómico que dirige Vicent Marzà reservará 175.000 euros en el presupuesto de 2022 para redactar el proyecto y prevé asignar 2.850.000 euros en 2023 y 1.805.165 euros en 2024 para sufragar las obras.
Por otro lado, también en materia educativa, el consistorio de la Vall d’Uixó ha recuperado la parcela municipal de 9.249 metros cuadrados que cedió a la Generalitat en mayo de 2013 para construir el primer colegio concertado en suelo público.
Aquella iniciativa surgió cuando la actual secretaria general del PPCV, María José Catalá, era consellera de Educación y el alcalde de la Vall era el hoy diputado popular en el Congreso, Óscar Clavell. Sin embargo, pasó al cajón de proyectos desechados en 2015, cuando la Generalitat cambió de signo político y Marzà aterrizó en la Conselleria de Educación.
El ejecutivo municipal que lidera la socialista Tania Baños esgrime para recuperar la parcela municipal ubicada en la Unidad de Ejecución B-C1 que ya han transcurrido más de cinco años desde que se firmó la cesión del solar sin que el Consell haya tramitado el colegio concertado.
