CASTELLÓN (EP). La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Castellón empezó la mañana del pasado martes 20 de noviembre los primeros trabajos de exhumación e identificación de cuerpos de represaliados por el franquismo en Castellón y que se encuentran en la fosa común del Cementerio de San José. Una vez finalizados los trabajos en esta primera fosa, se ha encontrado uno de los represaliados buscados, así como cuatro cuerpos más.
El equipo de arqueólogos de la Asociación Científica Arqueoantro, que también ha realizado las exhumaciones de las fosas de Paterna, ha finalizado ya los trabajos de excavación y exhumación de la primera intervención prevista, que ha tenido lugar en la fosa 1-8 (fila 1, sepultura 8), donde se buscaban los restos de Rafael Prades Trueba, fusilado el 21 de agosto de 1939, ha informado el consistorio en un comunicado. Los trabajos de búsqueda de este represaliado han sacado a la luz hasta cinco cuerpos. Los dos primeros se encontraron en cajas de reducción, por lo cual se entiende que estos restos pudieron ser trasladados, ya durante la democracia, desde la zona del Cementerio Civil Bajo.
A continuación, se ha encontrado dos cuerpos más que, en principio y a falta de confirmación por el ADN, podrían pertenecer a Vicent Colom, cuya familia ya había hecho la petición de exhumación, y a Enrique Devís, cuya sobrina ha acudido al mismo cementerio al ser localizada por el Grup per la Recerca de la Memòria Històrica de Castelló. El último de los cuerpos encontrados pertenecería, presumiblemente, a Rafael Prades, en cuyos restos se ven muestras evidentes del tiro de gracia.
Ahora, el equipo humano de Arqueoantro, dirigido por el arqueólogo Miguel Mezquida, ha empezado ya los trabajos de excavación de la segunda fosa prevista, la 4-27 (fila 4, sepultura 27), donde buscan los restos de Eduardo Ferreres. "Ya tenemos muy avanzada la excavación de esta segunda fosa y es muy probable que mañana lunes empecemos a sacar a la luz las primeras evidencias de huesos humanos", ha señalado Mezquida. Por último, y previsiblemente a finales de la semana próxima, se pueda acometer los trabajos de excavación de la tercera y última fosa, la 11-11 (fila 11, sepultura 11), donde se buscan los restos de José Monfort.
Una vez se han exhumado cada uno de los cuerpos, los restos son analizados y comparados con el ADN de los familiares en la Universidad Complutense de Madrid para certificar de manera científica su identidad. Mezquida explica que "se envían a Madrid una muestra óptima de hueso, normalmente una muela, que se compara con las muestras de saliva que se han tomado a los familiares". Además, el arqueólogo cuenta que "no sólo se recogen muestras de saliva a los familiares directamente emparentados con los restos que buscamos, sino también a familiares que ya se han mostrado interesados en estas exhumaciones y que realizaremos en otras fases a partir de 2019".
La concejala de Cultura, Verònica Ruiz, responsable del inicio de estas exhumaciones, se ha mostrado muy satisfecha por "la eficacia y la eficiencia del equipo de Arqueoantro". "Gracias a su rapidez al localizar los restos de los represaliados, las familias podrán cerrar muy pronto una herida que hace demasiados años que está abierta. Con la identificación final de estos restos, estaremos cumpliendo con un deber moral, humano y democrático", ha explicado.
Ruiz ha recordado que Castellón es "el primer ayuntamiento valenciano que lo hace con recursos propios" porque "es de justicia recuperar a los que fueron asesinados lejos del campo de batalla, sordamente, por no renunciar nunca a su dignidad y a su libertad". Por último, la concejala ha querido agradecer la visita y las palabras que la ministra de Justicia, Dolores Delgado, realizó ayer y que puso en valor la iniciativa de la Concejalía de Cultura, al afirmar que se trata de un acto "de decencia, de solvencia democrática, de libertad, de pasado y de futuro" y que "no es una cuestión de ideología, sino de dignidad".
