CASTELLÓ. La novedad en la dirección técnica del Castellón ya se está notando en los primeros entrenamientos. Juan Carlos Garrido ha elevado la intensidad de las sesiones, en un cambio de procedimiento al que tratan de aclimatarse los jugadores antes de encarar la segunda mitad de Liga.
Así lo ha reconocido el centrocampista Marc Mateu, que señala que aún no se han entrenado aspectos tácticos desde que el preparador valenciano asumió el cargo, este miércoles. "Hemos trabajado aspectos de intensidad y presión. Son otros métodos de entrenamiento, igual de válidos que los que teníamos antes, y se trata de adaptarnos lo más rápido posible", ha manifestado.
La plantilla albinegra se encuentra concentrada desde este viernes en el Parador de El Saler, donde permanecerá hasta el domingo. El plan inicial era trabajar durante cuatro días, pero finalmente se ha reducido a tres. Estas jornadas servirán para preparar el inicio de la segunda vuelta, programada para el 24 de enero, y que el equipo albinegro afronta "pensando en sacar 30 puntos como mínimo, pero sin marcarnos objetivos a largo plazo. Queremos hacer un buen partido ante el Sporting y ganar", ha priorizado Marc Mateu.
El centrocampista albinegro, que ya sabe lo que es pelear por la permanencia en Segunda División en sus anteriores etapas, cree que esa experiencia "es lo que más te nutre y te hace valorar lo que tienes día a día". El jugador valenciano confía en que 50 puntos sean suficientes para la salvación, aunque recuerda que la pasada temporada descendió con el Numancia con ese registro. "Se dice que con esa puntuación te salvas, pero el año pasado no fue así", advierte.