CASTELLÓ. Fracasada la privatización del parking subterráneo de la avenida Castellón, el Ayuntamiento de Nules ha activado el plan alternativo y ha sacado a licitación el contrato de mantenimiento del garaje. La pretensión, tal como ya anunció a Castellón Plaza el concejal de Urbanismo, César Estañol, es entregar las tareas de mantenimiento diario del recinto a una empresa para mantenerlo operativo.
El consistorio activó el pasado mes de mayo, por segunda vez en un año, el concurso para adjudicar la explotación del aparcamiento en régimen de concesión a 40 años. De nuevo ninguna empresa se interesó en el contrato, que quedó desierto.
Al estar automatizado el garaje, el consistorio pretende que una empresa supervise de lunes a viernes el correcto funcionamiento de la instalación, que reponga los consumibles agotados, que mantenga el recinto en buenas condiciones y que efectúe la limpieza diaria del parking de 250 plazas de lunes a sábado. Por estas tareas, el consistorio ofrece 39.000 euros y una duración del contrato de 5 años. De esta manera, el ejecutivo municipal nulense pretende garantizar la viabilidad del subterráneo.
Cabe recordar que Sedesa Concesiones, propiedad de la familia Cotino, construyó el garaje subterráneo en 2008 gracias a los 2,6 millones de euros de financiación de Caixabank. Sin embargo, tras abrirlo en 2009 no logró vender ni una sola de las 250 plazas de estacionamiento y apenas firmó una decena de alquileres entre los vecinos de Nules. Ante el rotundo fracaso del negocio, cuatro años después, en noviembre de 2013, cerró la instalación y renunció unilateralmente al contrato de concesión.
El actual ejecutivo municipal impuso a finales de noviembre de 2018 una sanción de 784.052 euros a Sedesa Concesiones por desentenderse del garaje y otra de 18.150 euros por el gasto de mantenimiento que ha acarreado hasta ahora a las arcas municipales, al tiempo que licitó por primera vez sin éxito el contrato de concesión.