CASTELLÓ. Nueva incursión mexicana en el mercado azulejero castellonense después de que el gigante fabricante Lamosa haya adquirido Baldocer. La compañía Foncer, centrada en la comercialización de productos cerámicos y otros productos acabados para la construcción, se ha hecho con Gresalia Cerámicas, una de las firmas distribuidoras del sector en Onda. Una operación consumada a lo largo de este año mediante la cual la firma mexicana espera expandir su negocio en el continente europeo desde la provincia de Castellón.
La compañía ondense, fundada hace once años, exporta a más de 30 países de todo el mundo materiales cerámicos de las principales marcas españolas pero también de otros orígenes como Italia, India, Portugal o China. La decisión de la mexicana Foncer de adquirir la firma se entiende a nivel estratégico para convertir las instalaciones de Gresalia en la carretera de Vila-real en uno de sus centros de distribución, en este caso para atender "el mercado español, pero también todo el mercado europeo y del norte de África", según explica el presidente de la empresa.
Las conversaciones se iniciaron en septiembre de 2022 y el acuerdo se fraguó desde abril de este año hasta la firma definitiva, que se ha producido recientemente. De hecho, el cambio de propietario se reflejó en el Boletín Oficial del Registro Mercantil el pasado mes, aunque el importe de la operación no se ha hecho público. La firma mexicana se hace así con "un aliado más en este continente".
Actualmente, Foncer es una de las comercializadoras con presencia en diversos países de América del Sur, Centroamérica, el Caribe y Estados Unidos. Cuenta con nueve centros de distribución en Ciudad de México, Monterrey, Guadalajara, Veracruz, Chihuahua, Mérida, Tijuana y Manzanillo, y mueve cerca de 4.200 contenedores anuales de diferentes productos: principalmente materiales cerámicos y porcelánicos, pero también vidrio, mosaicos, inodoros, muebles, vinilos, etcétera.
En ese sentido, la adquisición de Gresalia en Onda constituye "la primera incursión" en España y en Europa, aunque ciertamente tal como explican en la firma, "ya había operaciones" comerciales intercontinentales. Se trata, a la postre, de "parte del plan de adquisición" con una "visión global de expansión para atacar otros mercados, posicionar mejor la marca y buscar más sinergias" tras más de dos décadas de crecimiento en el continente americano.
Uno de los aspectos que destaca el presidente de la firma mexicana es, especialmente, que la adquisición mejorará la proximidad en el trato con los clientes europeos. "Nosotros buscamos estas oportunidades acercándonos a los clientes", subrayan las mencionadas fuentes, para añadir que esto propiciará un mejor análisis de sus necesidades para incorporar nuevos productos y categorías, en su caso, y una atención mucho más cercana y profesional.
La compañía trabaja con hasta ocho categorías de productos, que incluyen el azulejo y los productos porcelánicos de diferentes orígenes como España, Italia, Turquía, India o China, pero también de Indonesia, Brasil o Guatemala. En ese sentido, el presidente de Foncer subraya que es distribuidora de "todo tipo de gamas" de cerámica, "desde el producto más económico hasta un mercado de mayor valor", si bien se centra sobre todo en el de una gama "media y media-alta".
De cara al año que viene, Foncer espera "recuperar mercados como el de Argelia", en el que se mantiene un bloqueo comercial con España desde que el Gobierno español reconociera el plan de Marruecos para el Sahara. Ciertamente, parece que las relaciones diplomáticas se van a empezar a recuperar y la relación entre ambos países mejorará, por lo que Foncer espera también distribuir al país argelino desde Castellón. Así pues, prevé "reforzar la plantilla" sobre todo en el ámbito comercial.