VILA-REAL. Pau Torres (Vila-real, Castellón, 1997) podría acumular 5.500 minutos si España llega a la final de los Juegos Olímpicos y él disputa los 90 minutos. Una cifra a la que no le da vueltas porque está “con fuerzas” y disfruta “jugando al fútbol”. En una amplia entrevista con la Agencia EFE asegura que está “viviendo un sueño”. Es su año. Ganador de la Liga Europa con el Villarreal e integrante de la selección española en la pasada Eurocopa y en Tokyo2020.
Un protagonismo que hace que su nombre esté en la lista de grandes equipos europeos, pero él se ve en su casa, el Villarreal, la próxima temporada. Su “reto” la próxima temporada es dejar a su club “en lo más alto que sea posible” en una campaña histórica en la que vuelven a la ‘Champions’.
-¿Cuánto sufrió con el 1-1 de Argentina tras el que un gol nos dejaba fuera de los Juegos Olímpicos?
-A todo nos hubiera gustado no encajarlo y estar más tranquilos… pero necesitaban volcarse para intentar seguir en la competición y nos iba a exigir. El gol llegó a balón parado, con mucha gente de ellos en nuestra área. Tuvimos la mala suerte de que nos metieran un gol, pero no recuerdo muchas más ocasiones de ellos, aunque nos colgaban balones y demás. Supimos solventarlo bien y tuvimos esa suerte de que el árbitro no les dejó tirar ese córner con el tiempo ya cumplido (ríe).
-Hasta ese partido España no había recibido gol. ¿Qué se puede aprender de esa situación?
-Recuerdo que en la media parte lo hablamos. Argentina nos había sacado muchos córners, varias faltas colgando el balón… sabíamos que teníamos que intentar minimizar esas ocasiones a balón parado ante un equipo que con el juego no te llegaba con tanta claridad. Para los siguientes partidos hay que intentar conceder el mínimo número de ocasiones a balón parado y a partir de ahí estar igual de bien que hemos estado con balón, que nos permite que el rival nos ataque menos.
Con balón España ha estado bien, pero le falta puntería; algo que ya vivió con la absoluta. ¿Qué aprendió de esa situación que pueda emplear ahora con la olímpica?
-Que si el trabajo es bueno y el equipo genera ocasiones, los goles caen por su propio peso. Estamos generando muchas ocasiones. En los entrenamientos tenemos buenas sensaciones con los ejercicios de finalización. Dándole confianza a nuestros delanteros y a la gente que está cerca del área es la mejor forma de que ellos se sientan a gusto y que en un futuro cercano convirtamos las ocasiones que tengamos.
-Ahora tocan los cuartos de final contra Costa de Marfil. Una selección muy física y en condiciones climáticas duras que viven ahora, también contra Argentina, tras haber jugado en Sapporo a 22 grados centígrados. ¿Cómo lo afrontan?
-Era de agradecer el estadio de Sapporo, nos permitía jugar con unas características climatológicas más parecidas a lo que estamos acostumbrados, pero también sabíamos a dónde veníamos. Tarde o temprano nos iba a tocar lo del otro día. Se hizo bien viniendo con tiempo y entrenando por las tardes, que es cuando nosotros tenemos que competir; en ese aspecto estamos acostumbrados.
Respecto a Costa de Marfil, creemos que van a ser más peligrosos que las anteriores en las transiciones cuando nosotros tengamos el balón en su campo porque tienen gente más vertical y que está jugando en grandes equipos de Europa. Se merecen estar donde están. Ellos tampoco estarán contentos de que les haya tocado enfrentarse a España.
-Salisteis de la Villa Olímpica para este partido, pero usted consiguió una foto y la camiseta de Pau Gasol. ¿Qué supone para usted Pau Gasol?
-Es uno de los tres grandes de nuestro deporte, con Nadal y Fernando Alonso; es lo máximo que tenemos en España. El conseguir conocerle de cerca y tener un recuerdo para toda la vida de un ídolo que desde pequeño has gritado desde el sofá con sus actuaciones es algo único que solo los Juegos Olímpicos te permite cumplir. De él me quedo con su cercanía y que era conocedor de cómo estaba la situación de nuestra competición y se mostró con mucha seguridad de cómo estaban ellos. Ojalá el domingo volvamos a la Villa y podamos encontrarnos de nuevo los dos en semifinales.
-Imagino que sigue las informaciones de los Juegos Olímpicos. Me gustaría preguntarle por el caso de Simone Biles y su renuncia a competir para cuidar su salud mental. ¿Cómo gestiona usted esa presión del deporte de élite?
-Respeto completamente la decisión que cualquier deportista tome en estos aspectos, nadie sabe lo que pasa por la cabeza de otras personas y seguro que vive una situación muy difícil. Yo por ahora intento afrontar cada competición con máxima ilusión, estoy viviendo un sueño. En ese sentido estoy muy tranquilo de todo lo que se hable de puertas para afuera y me centro en mis compañeros y en mi familia.
-¿Cómo se está sintiendo en estos Juegos Olímpicos? Está dando una sensación de gran seguridad.
-Me estoy encontrando bien. Tengo la confianza de todo el grupo desde el primer día y estoy cómodo. Físicamente estoy bastante bien a pesar de venir de la Eurocopa, todavía estoy con fuerzas y las vacaciones ya llegarán.
-Respecto al cansancio. Si llega a la final de los Juegos Olímpicos jugando todo llegaría a los 5.500 minutos. Desde que estuvo en Segunda B ha jugado 17.091. Casi un tercio lleva esta campaña. ¿Cómo se gestiona ésto?
-No me he parado a pensar cuántos partidos jugados. Intento recuperar partido a partido y por suerte las molestias que aparecen se pueden solventar. A partir de ahí uno busca su mejor nivel y tratamos de seguir jugando porque disfrutamos jugando al fútbol y con eso nos conformamos.
-¿Después de los Juegos Olímpicos jugará la Supercopa de Europa con el Villarreal?
-Sí. Desde el primer momento que supe que iba a venir a los Juegos me puse en contacto con mi club y vimos cuándo eran las fechas. El Villarreal viaja el día 10 hacia Belfast y ya sé los horarios que tendremos después de esa supuesta final, que esperamos poder disfrutar de ella, y me da tiempo a todo (ríe). Voy a estar disponible para lo que el míster quiera de mí; yo quiero estar ahí acompañando al equipo.
-La última. Su nombre está en la agenda de muchos clubes de Europa. ¿Se ve la temporada que viene con la camiseta amarilla del Villarreal?
-Sí. Es algo que comenté. Este año tenemos un reto muy importante. Es la tercera vez que el club juega la ‘Champions’ y hay un recuerdo bastante amargo de la última vez en la que se jugó y fue el año del descenso. Este año esperamos hacer un buen papel a la altura de lo que exige la competición y dejar al club en lo más alto que sea posible. Ese es mi reto de cara a la próxima temporada.