CASTELLÓ. Los 27 concejales de la ciudad de Castelló han tomado posesión este sábado en el pleno de constitución del Ayuntamiento. La mayoría ha prometido el cargo, a excepción de los siete ediles del PP, el concejal de Vox y un miembro de Ciudadanos, que han optado por la fórmula del juramento sobre un ejemplar de la Biblia que ha ido pasando de mano en mano.
El protocolo indica que los primeros nombramientos deben ser los de los concejales de menor y de mayor edad de la corporación. En este caso, se trataba del socialista Jorge Ribes y de María Jesús Garrido, de la confluencia. El resto de ediles toman posesión por orden de candidaturas -de la más votada a la menos- y por el lugar que ocupen en cada lista.
Así, han desfilado primero los concejales del PSPV, con Amparo Marco a la cabeza. Todos los socialistas han prometido el cargo -David Donate, Pilar Escuder, Rafa Simó, Patricia Puerta, José Luis López, Mary Carmen Ribera y Omar Braina-, a excepción de Isabel Granero, que ha escogido el juramento.
El siguiente turno era para el PP. La cabeza de lista, Begoña Carrasco, portaba una biblia que ha puesto sobre la mesa -junto a la Constitución-, para jurar sobre ella. A continuación han hecho lo propio el resto de ediles populares, Vicent Sales, Sergio Toledo, Susana Fabregat, Juan Carlos Redondo, María España y Vicente Guillamón.
Después ha tomado posesión el número uno de Ciudadanos, Alejandro Marín-Buck. En un gesto que no ha pasado inadvertido, ha retirado la Biblia que seguía sobre el mostrador para prometer el cargo únicamente sobre la Carta Magna. Acto seguido, un responsable de protocolo ha cogido el texto sagrado y lo ha devuelto a los populares.
La anécdota ha llegado dos turnos después, cuando el edil de Ciudadanos Vicente Vidal le ha pedido la Biblia al popular Vicent Sales, siendo el único concejal de los cuatro de la formación naranja que ha elegido el juramento. Tras él, el libro ha vuelto a su dueño, y Paula Archelós y Esteban Ventura han prometido el cargo.
Le tocaba después a Compromís, cuyo portavoz, Ignasi Garcia, ha sido el único edil de toda la corporación que se ha salido de la fórmula habitual, al iniciar la promesa sobre la Constitución con la frase "por imperativo legal". Por el contrario, los otros dos concejales de la coalición valencianista, Verònica Ruiz y Francesc Mezquita, se han ceñido al texto ordinario.
También han prometido el cargo siguiendo la fórmula clásica Fernando Navarro y María Jesús Garrido, de Unides Podem-CSeM-EUPV. Al contrario que el concejal de Vox, Luciano Ferrer, quien de nuevo ha solicitado la Biblia a Vicent Sales para jurar el cargo. Hasta cinco viajes de ida y vuelta al mostrador ha hecho el texto sagrado.
Tras prestar juramento o promesa, la presidenta de la Mesa de Edad, María Jesús Garrido, les ha impuesto la medalla, uno a uno, a cada miembro de la nueva corporación municipal, que ha quedado así constituida con un total de 27 concejales de seis grupos políticos.
Garrido, que se estrena en el Ayuntamiento como edil de la confluencia e integrante del nuevo gobierno de coalición, ha acaparado buena parte del protagonismo en el pleno de investidura, pues era la encargada de conducir el acto con el que se da inicio a la legislatura. La liturgia municipal ha corrido también a cargo de Jorge Ribes como miembro más joven de la corporación, que se ha encargado de anunciar los nombres en la toma de posesión.