CASTELLÓ. La llegada al banquillo del Castellón de Albert Rudé no solo ha supuesto una transformación en el modelo de juego del equipo. También ha significado un cambio en algunos roles individuales.
En este sentido, cabe destacar la visibilidad que han adquirido en el apartado goleador dos futbolistas desde la incorporación del técnico catalán: Raúl Sánchez y Giorgi Kochorashvili. Estos jugadores, que no brillaron de cara a puerta en la primera vuelta, se han desmelenado desde que Rudé ha asumido el cargo de entrenador orellut.
En el caso del extremo madrileño, su irrupción se produjo el día en que debutó el nuevo técnico, con un doblete frente a Osasuna B. Después, Raúl Sánchez anotó frente al Atlético Baleares y el Amorebieta, para sumar cuatro tantos en ocho partidos dirigidos por Rudé. En los 19 choques anteriores solo había totalizado dos.
Kochorashvili, por su parte, se ha convertido en un argumento goleador de peso para el entrenador albinegro pese a no ser titular indiscutible. El georgiano solo ha jugado de inicio en cuatro de los ocho partidos que lleva Rudé al frente del Castellón, pero ha anotado en tres ocasiones. Su racha empezó ante el Eldense y continuó frente al Intercity, antes de prolongarla el pasado fin de semana contra el Alcoyano. En la primera mitad de campeonato había logrado un solo gol.
Estas irrupciones se han producido en una fase de competición en la que el Castellón se ha tenido que acostumbrar a la ausencia de su anterior líder goleador, Dani Romera, que salió en el mercado de invierno. Además, los sustitutos del almeriense en la función realizadora, Jesús de Miguel y Adrián Fuentes, aún no han encontrado continuidad debido a las lesiones, mientras que el otro delantero de la plantilla, David Cubillas cuenta poco en los esquemas de Rudé.
Romera sigue siendo el máximo realizador del Castellón, con siete tantos, pero podría ser superado en las próximas jornadas. Raúl Sánchez está a solo un tanto, empatado con el sorprendente Manu Sánchez, que también ha anotado bajo las órdenes de Rudé.