CASTELLÓ. La adhesión del Ayuntamiento de Xilxes al acuerdo transitorio con la sociedad estatal Acuamed para poner en marcha la planta desaladora de Moncofa, que se materializó en primavera, permitirá garantizar el suministro de agua al polígono industrial de la localidad, al menos hasta 2024.
El polígono alberga empresas del sector cerámico como Alaplana o Colorker, que demandan crecientes cantidades de agua para desarrollar sus actividades productivas. Alguna de ellas, como Colorker, pretende incluso trasladar su sede central al antiguo Hotel Simba. Con el abastecimiento de la planta, además de garantizar el suministro a las actuales compañías, el consistorio se asegura la disponibilidad de agua para nuevas incorporaciones empresariales al recinto.
Xilxes secunda así a Moncofa, después de firmar con Acuamed un acuerdo transitorio que también le permitirá disponer de agua desalada para sus futuros desarrollos urbanísticos a un precio más bajo hasta 2024. Las anteriores tarifas, pactadas en el año 2006 con Acuamed para posibilitar la construcción de la desaladora, eran inaccesibles para el consistorio. Por ejemplo, la vecina localidad de Moncofa debía pagar la inviable cantidad de un millón de euros durante 25 años para amortizar la infraestructura.
En estos cinco años, la sociedad estatal deberá captar nuevos usuarios que hagan sostenible el funcionamiento de la desaladora. Además, la instalación construida en 2010 pasará a ser de ámbito comarcal para abrir así el abanico de posibles usuarios. Esta moratoria proporciona ahora cinco años de respiro para negociar con Acuamed un convenio definitivo... y para buscar nuevos usuarios que repartan los gastos de funcionamiento y de amortización.
El portavoz del Ayuntamiento de Xilxes, el socialista José Manuel Navarro, considera que el convenio definitivo que se firme antes de 2024 "deberá ajustarse a las necesidades reales de los municipios e intentar abrir la puerta de la desaladora a más localidades". Navarro ve el convenio transitorio "un paso importante y positivo", ya que es "un punto de partida en la pelea para modificar el convenio inicial".
Desde la oposición el portavoz municipal del PP, Vicente Martínez, cree que el convenio transitorio es "asumible", pero considera fundamental que a partir de ahora "no dejemos de reivindicar que la amortización de las instalaciones no la paguen los ayuntamientos sino el Estado, como cualquier otra infraestructura hídrica supramunicipal".
La única voz discordante es la del portavoz municipal de Compromís, Sergio Alejos, quien recuerda los "sobrecostes del 40%" en las obras, la falta de conexión con el casco urbano de Xilxes y que la infraestructura "apenas pueda funcionar como máximo al 25%".
Acuamed puso en marcha la desaladora de Moncofa a finales del pasado mes de marzo para evitar la devolución de 35 millones de euros en ayudas comunitarias otorgadas para la construcción de esta planta y la de Orpesa.
Como esta, la instalación de Moncofa desarrolla su actividad a medio gas. Apenas cubre el 10% del abastecimiento de agua potable de la localidad, a la que se ha sumado únicamente Xilxes. Además, el grupo cerámico STN (antigua Stylnul) también hará uso de un millón de metros cúbicos anuales de la desaladora para abastecer la creciente producción azulejera en su planta de Nules. Con estos suministros, la instalación apenas funcionará al citado 10% de su capacidad máxima, de 10,5 millones de metros cúbicos de agua anuales.
